El misterio de lo desconocido, ¿qué hay más allá de las nubes? Bastó con una mirada hacia el horizonte para que el miedo nos invadiera, pero dentro de este había una caja con la advertencia de mercancía frágil que aguardaba la curiosidad. Desde entonces, el espíritu explorador nos ha traído hasta donde estamos. Para bien o para mal, hemos edificado nuestra civilización hasta tal punto en el que aquellas historias de ciencia ficción comienzan a hacerse realidad.
Pensar en ir a la luna parecía una locura apenas hace un siglo, hoy estamos a menos de diez años de visitar Marte por primera vez. ¿Será que aquellos escritores que parecían soñadores se volvieron profetas?
La historia de la humanidad se ha construido y destruido simultáneamente. ¿Cuántas veces hemos sido aquel gato asesinado por la curiosidad? No hace falta escribir aquella lista que sabemos que es grande, que nos ha dejado huellas y heridas en nuestro archivo. Sabemos que muchas decisiones no han sido, quizá, las más óptimas para nuestra propia especie.
Sin embargo, sí podemos hablar de aquellos saltos en los que hemos pasado de ser una civilización primitiva a una tecnológica. Un día miramos al cielo y las preguntas nos abordaron, desde entonces hemos soñado con salir y explorar lo que está más allá de nuestro planeta.
Todavía nos faltan miles, quizá de millones, de años luz para alcanzar aquellas fantasías en las que viajamos de una galaxia a otra en cuestión de minutos, pero no cabe duda que los logros que nuestra especie ha alcanzado en el ámbito espacial son bastantes y este 2021, a pesar de seguir en pandemia, se ha destacado por ello.
Hagamos un breve recuento de los tres hitos espaciales más destacados del año.
Turismo Espacial una realidad
La empresa del multimillonario Jeff Bezos, Blue Origin, lanzó su cohete suborbital reutilizable New Shepard con el fin de dar inicio a los primeros viajes turísticos espaciales. Para esto, convirtieron el cohete en una centrifugadora para simular la gravedad de la Luna.
Para inaugurar el turismo espacial, la nave llevó a bordo al mismísimo capitán James T. Kirk de la serie Star Trek: William Shatner. Igualmente, lo acompañaron Audrey Powers, vicepresidenta de Misiones y Operaciones de Blue Origin; Glen de Vries, fundador de la empresa Metadata, y Cris Boshuizen, fundador de la compañía Planet Labs y exingeniero de la NASA. Asimismo, el mismísimo Jeff Bezos viajó en la nave.
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DART y Armageddon hecho realidad
Con la intención de que la NASA pueda comprobar si la humanidad es capaz de desviar la trayectoria de las posibles amenazas celestes que se dirijan a nosotros, nació la misión DART.
DART es una nave del tamaño de cualquier automóvil promedio y tiene la misión de impactar el asteroide Dimorphos o Didymos para comprobar si nuestra tecnología ya se encuentra en la posibilidad de hacer cambiar de órbita a un asteroide, en caso de que exista una amenaza real.
Con 160 metros de diámetro, Dimorphos orbita alrededor de Didymos, una estructura mucho más grande. Se trata de un asteroide binario que, de hecho, se considera una posible amenaza para la Tierra, según datos oficiales de la NASA, es por eso que lo han seleccionado cómo experimento.
Una vez que se logre lo esperado, cambiar la trayectoria del asteroide, cinco años después llegará Hera, una misión de la Agencia Espacial Europea (ESA), al cuerpo celeste para comprobar si en efecto funcionó. DART ya fue lanzado y ahora queda esperar a ver los resultados.
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Navidad con nuevos lentes: James Webb, el sustituto del Hubble
Como regalo de Navidad, la NASA le regaló nuevos y más sofisticados lentes espaciales a la humanidad para poder explicar el universo profundo con mucho más detalle e intenciones más específicas en la búsqueda de posibles planetas similares a la Tierra.
Se trata del Telescopio James Webb, que prestará especial atención hacia los orígenes de la vida como la conocemos, y el lanzamiento será a bordo de un cohete llamado Ariane 5, desde la Guyana Francesa. Su destino está a 1,5 millones de kilómetros de nuestro planeta.
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