Es común que gran parte de melómanos digan que el trabajo de Julian Casablancas, Albert Hammond Jr., Nick Valensi, Nikolai Fraiture y Fabrizio Moretti es música para "quinceañeros” o “chavitos”, y cumpliendo cierta edad es ridículo disfrutar a esta agrupación. Lo cierto es que The Strokes cambió una era, mediante una discografía donde se puede observar que su sonido desalineado y estruendoso ha dado algunos saltos evolutivos (no todos muy aplaudidos) que aún los mantiene en el radar del público.
Los liderados por Julian Casablancas, iniciaron su carrera en 1998, con escasos 20 años edad. Se trataba de unos jóvenes ansiosos de expresar el abanico de emociones que habitan en la inexplicable adolescencia. The Strokes, le devolvieron vida al rock de guitarras más tradicional, impusieron un sonido propio e identificable y de algún modo despertaron una enorme cargada de artistas que llevan al género hasta nuevos límites. Se podría incluso decir que The Strokes inauguraron la música indie rock como se le conoce hoy en día, exhiben obsesiones y contradicciones que formarían una marca en su música. Sus letras hablan de progresos personales que no terminan de suceder, dinámicas entre chicos y chicas en las cuales nunca se sabe quién gana, de la insoportable tendencia a la nostalgia y de los necios que afirman que todo tiempo pasado fue mejor.
Intencionalmente o no crearon nuevas tendencias y como resultado recurrieron a los pantalones entubados, tenis Converse y chamarras de mezclilla o piel desgastada, con camisetas de diseños divertidos y tan sencillos como los de cualquier adolescente. Se despeinaban cuidadosamente por las mañanas y portaban la actitud desfachatada y relajada. Entonces, el mundo entero se vestía igual. Los cinco chicos de Nueva York se habían convertido en el estandarte de la juventud y la rebeldía, pero al mismo tiempo de la moda. Dejando a un lado el look, esta banda encadenó dos grandes discos que describieron parte de la esencia “post 11 de septiembre”, los recordados Is this it y Room on Fire, de 2001 y 2003 respectivamente, que proyectaban una imagen que iba desde el hedonismo hasta la superficialidad. Todo en un envase insoportablemente pop rock y a tono con la estética "retro” que en ese entonces empezaba a dominarlo todo.
Y regresando al tema con el que inicié este artículo, ¿la música tiene rango de edad o fecha de caducidad? Lo importante en el arte son las emociones que provoca y si una canción de "quinceañeros” revoluciona la mente de una persona de 30 años ¿cuál es el problema?
Han pasado casi 20 años desde que The Strokes apareció en el mundo de la música. Hoy ya no son los adolescentes de jeans rotos y tenis gastados. En 2016 presentaron el EP Future Present Past, una colección de tres temas y un remix, pero su último álbum, lanzado en 2013, el discreto Comedown Machine, fue duramente recibido tanto por el público como por la crítica.
Pero no hay que olvidar otros proyectos en los que Casablancas ha participado. The Voidz no es exactamente un proyecto solista, pero casi: lo acompaña un combo de talentosos amigos, que también firman los trabajos con él. Y si bien no puede decirse que la nueva música tenga poco que ver con los anteriores trabajos de Casablancas, puedo afirmar que ha llevado al extremo todos sus recursos e influencias clásicas. De este proyecto hemos hablado, así que, si quieres saber más de The Voidz ingresa aquí, debido a que junto a The Strokes son parte del denominado Capítulo 10 del festival Corona Capital 2019 a celebrarse este fin de semana en la Curva 4 del Autódromo Hermanos Rodríguez.