Llegó octubre y la temporada de las brujas ya comenzó. Mientras el planeta sigue girando, ahora un poco más alejado del sol, al menos en el hemisferio norte, y la vida continua entre noticias escabrosas de nuestra cotidianidad como seres humanos, y las tendencias forman parte de este panorama.

El mundo transita y nosotros en él, y aunque estemos en el siglo XXI 2022 nuestra especie sigue convencida, o si no es que al menos lo sospecha, de que somos apenas un porcentaje nimio de todo lo que nunca vamos a entender en el universo. Aquellos cuestionamientos filosóficos, ontológicos y espirituales que nos han abordado desde nuestra mente primitiva, hasta ahora permanecerán para siempre, dentro de nosotros. 

Pensar en una religión, o en dios, son palabras enormes para lo que llevamos de historia. Sin embargo, aunque en plena era tecnológica la ciencia ya está por llevarnos a Marte, es verdad que las palabras mencionadas, o sus conceptos, siguen latentes y verdaderamente vivos en nuestros discursos, ideas, tradiciones (en algunos lugares más que otros) y demás. Es decir, nuestra cotidianidad no ha separado, ni creo que lo haga, la idea de que hay algo más allá, o no tan allá pero sí algo más grande que nuestro propio entendimiento. 

Después de todas estas disertaciones, muy a título personal, aterrizo en la narrativa antiquísima en donde las brujas reinaban en el imaginario colectivo, ¿únicamente imaginario? ¿reinaban, en tiempo pasado? Es decir, se trata ya de un tópico que quizá muy a inicios tenía más que ver con una construcción social en la que las mujeres nos hemos visto atadas desde siempre a la mirada masculina desde un punto de vista inquisidor. 

Sin embargo, todo el tema de la magia y los hechizos tampoco fueron un asunto de completa falsedad. ¿Hasta qué punto las brujas existieron, existen y seguirán existiendo? Más allá de un disfraz para nuestras fiestas de Halloween, estos míticos personajes parecen haber sobrevivido a la quema, y han heredado los poderes que la luna les ha ofrecido a las generaciones siguientes y siguientes, por los siglos, de los siglos hasta que no quede ni un solo suspiro más. 

Quizá ser bruja no se trate de convertirte en una, sino de recordar lo que siempre has sido. Un regreso a casa, una mirada interior para reconocer tu poder y potencial que la luna, la energía y tú misma has tenido desde siempre.

A veces son nuestras abuelas, nuestras madres, en otras ocasiones son amigas, o mujeres cercanas en nuestra vida que nos recuerdan esta sabiduría ancestral. Sin embargo, nunca está de más reafirmar estos conocimientos desde la literatura y sus pertinentes publicaciones sobre este recuerdo de quienes somos. 

Por eso hoy te recordamos que eres una bruja y qué libros te ayudarán a recordarlo todavía mejor, se trata de libros que son pequeñas y accesibles guías basadas en conocimientos ancestrales.

Cómo ser bruja moderna, de Gabriela Herstik 

“Convertirte en bruja es un despertar, un recordar, una iniciación. Es un cántico que entona un mantra - “Vuelve a casa, vuelve a casa, vuelve a casa”-, porque incluso cuando crees que estás perdida, no lo estás”.

Son los versos iniciales de esta explícita y gran obra de Herstik. Se trata de una guía básica para despertar el conocimiento interno. Mirándolo desde la narrativa actual en donde la brujería y estos temas de misticismos se han convertido, nuevamente en tendencia, Hestik explora los temas de los cristales, tarot y astrología y demás. 

Igualmente, habla de hechizos y rituales para aprender a cuidarse uno mismo y saber cómo aprovechar tu energía psíquica, Igualmente enseña a cómo mantenerte lejos de la energía menos conveniente para ti. En resumidas cuentas, esta exploración radica en entrar de nuevo en el mundo natural, a tomar el control y a reconectar contigo misma desde esta mirada y reconocimiento místico propio. 

Wicca para principiantes: Guía de creencias, rituales, magia y brujería wiccana, de Lissa Chamberlain

En el mismo marco narrativo, este libro ahonda en el tema de las wiccas, o brujas, desde un punto de partida iniciático, pero veraz. En este libro hallarás: “La historia de la wicca, con sus fundamentos modernos y sus inspiraciones antiguas.Una introducción a la figura de la diosa y del dios, y a los múltiples aspectos de ambos.Un resumen de los aquelarres, círculos y prácticas eclécticas y en solitario propias de la wicca, así como una descripción de los sabbats y los esbats.Un ejemplo de ritual y de hechizo, adecuados para principiantes.Tablas en las que se muestran las correspondencias entre una selección de colores, cristales, hierbas y aceites esenciales”. 

El altar interior, de Juliet Díaz

De la autora del bestseller Brujería, esta obra continen la magia, espiritualidad y la sanación desde un enfoque en donde todo se reencuentra en la revolución espiritual.

“Al enfocar la espiritualidad de esta forma tan original y diferente, la autora rompe con los círculos viciosos de las creencias y prácticas espirituales tóxicas y dañinas, descubriéndonos la posibilidad de alcanzar el éxito en cada área de nuestra vida, desde la riqueza, la salud, las relaciones y el desarrollo personal, cultivando nuestro vínculo con lo divino”.

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