Los amigos están ahí para edificarte. Incluso cuando los magnates del maquillaje intentan derribarte y destrozarte.
La cinta Like a Boss (Socias en Guerra) es la nueva película protagonizada por Tiffany Haddish (Girls Trip), Rose Byrne (Neighbors) y Salma Hayek (From Dusk Till Dawn) y dirigida por Miguel Arteta (The Good Girl). En este estreno, la belleza, el glamour y la ambición, se mezclan para crear una ligera comedia con lazos fuertes de amistad.
La guerra ha empezado y el enemigo a vencer es Salma Hayek.#SociasEnGuerra ya está en tu cine favorito.
— Paramount Pictures (@ParamountMexico) January 31, 2020
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Socias en Guerra sigue la historia de dos mejores amigas que han sido inseparables desde la escuela primaria: la creativa e irreverente Mia Carter (Haddish) y Mel Paige (Byrne), una empresaria insegura proveniente de un hogar roto que fue acogida por la familia de Mia. Las dos son copropietarios de Mia & Mel, una compañía de cosméticos que construyeron desde cero.
Temerosa de herir los sentimientos de su amiga, Mel ha estado ocultando el hecho de que la compañía de maquillaje que poseen tiene una deuda de casi medio millón de dólares. En cambio, ella pasiva intenta agresivamente hacer que Mia trabaje más para que puedan ganar más dinero.
Desesperadas para no perder su negocio buscan ideas para no llevar a la bancarrota a Mia & Mel. Ahí es cuando Claire Luna (Hayek) entra en escena. Con una peluca naranja brillante y vestidos llamativos y ajustados. Claire es la directora ejecutiva de una de las compañías de maquillaje más exitosas del mundo, y quiere comprar la compañía de estas dos amigas. Ella acepta saldar la deuda de Mia & Mel y darles el 51% de las acciones de su empresa, pero solo si pueden mantener su amistad.
Poco saben que Claire Luna no es la feminista que apoya a las mujeres que pretende ser, sino una empresaria despiadada que intenta romper la sociedad de Mia & Mel y robar sus ideas. En pocas palabras, Claire es un tiburón intrigante, que busca sangre y control total del negocio. Mel está extasiada. Mia ... no tanto. Ella no confía en Claire. Y cuando las dos mejores amigas comienzan a discutir sobre lo que es mejor para su compañía, queda bastante claro por qué Claire incluyó esa pequeña cláusula de amistad.
Lo sólido de su amistad es clave; no solo ayuda a construir sus personajes, sino que también proporciona una visión más profunda de la eventual división que amenazará tanto su amistad como sus negocios.
¿Podrán Mia y Mel pasar por alto los problemas y recordar por qué son las mejores amigas? ¿O fracasará su amistad y su compañía caerá en manos de Claire Luna?
Claro que hay muchos “peros”, nada graves, pero es importante conocerlos. Uno de ellos, es el papel de Hayek, quien parece más una villana de telenovela al presentarla como un personaje caricaturizado.
Otro punto débil cae en lo predecible que luzca la trama, pero lo más grave e incoherente es que, a lo largo del filme, buscan propagar la belleza interna como el recurso más importante en la vida cuando la conclusión, se basa en el mero éxito económico.
La luz o lo agradable llega cuando nos presenta bromas ocasionales divertidas, en su mayoría cortesía de la genial Tiffany Haddish. Pero cuando la cinta destaca la dinámica entre Haddish y Byrne mientras hace algunos chistes impactantes sobre la sexualidad femenina, se convierte en la fusión perfecta.
No te pierdas Socias en Guerra, la cual llega a las salas de cine a partir de hoy.