El cuidado de la piel es uno al que pocos atendemos, sobre todo cuando entre las demandas de la vida cotidiana y el tiempo tan ajustado en el que vivimos, nos obstruyen para que terminemos muertos de cansancio al finalizar el día, sin que siquiera nos importe invertir un poco de tiempo en el cuidado de nuestra piel.

Pero lo cierto es que todos queremos una piel radiante y vernos siempre lo mejor que podamos, y para eso existe una solución. Se trata de una rutina de skincare completamente efectiva e increíblemente corta y fácil de hacer en apenas unos minutos. Así que ya no tendrás pretextos. 

Primero que nada, ¡adiós suciedad!

Lavar la cara es fundamental, pues durante el día ya estuvimos expuestos a la contaminación, bacterias y demás, sumando a esto el maquillaje o bloqueador que traigamos encima. Para esto es importante tener un limpiador especial, uno que te deje la piel completamente limpia sin lastimarla. 

Exfoliante es el segundo paso… 

Lo mejor de este paso es que no es diario, de preferencia es un día sí y un día no para mejores resultados. Pero de todos modos es igual de importante que todo, pues esto nos ayuda a dar una limpieza completamente profunda en cuanto a las impurezas y bacterias que podamos albergar en nuestra piel, incluso después de lavada. 

A hidratar…

Este paso es fundamental, pues una vez que ya le hayas dado la suficiente atención a la limpieza de tu rostro, lo siguiente es hidratarla. Una crema hidratante basta para esto y para que tu cara amanezca completamente relajada y firme, lista para iniciar un día nuevo, y lo mejor de todo, sin tanto esfuerzo, sobre todo para la rutina diaria en la que el trabajo, escuela o demás puede agotarnos tanto. Quizá para algo más excéntrico puedes darte el tiempo un fin de semana, sin tantas presiones y consentirte para hacer tu propio spa. 

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