A pesar de no haber lanzado ningún álbum desde 2015, la exestrella de Disney, Selena Gomez, no ha salido del radar. Ya sea por la facilidad que tiene de hacer singles exitosos, o por el fetiche que tienen los tabloides amarillistas con su salud y vida amorosa.

Situaciones que el equipo de Gomez y ella misma han explotado, no por nada “Lose You To Love Me” del año pasado fue el primer número 1 en el Hot 100 de Billboard de la cantante. 

En esta canción unió su versión de la polémica relación con Justin Bieber, escrita de la mano de los hitmakers Julia Michaels y Justin Tranter, con la producción de los suecos Mattman & Robin, así como Finneas, el hermano y productor de Billie Eilish quien ha demostrado que menos es más. 

El trabajo de todos se vio reflejado en un video patrocinado por iPhone, ya que fue grabado completamente con el nuevo modelo de Apple. Es decir, un combo rompedor que no pasó desapercibido. Ya sea por los que adoran una buena balada pop, así como los que buscaban chisme.

La realidad es que necesitaba una buena forma de regresar al mundo musical en solitario, y sin duda, la mejor forma fue romper el silencio que siempre ha caracterizado a Gomez. Algo que ya le había servido a Ariana Grande, con su inesperado álbum thank u, next (2019).

Así pues, quien espere más “información” de la vida amorosa de Selena, le podemos adelantar que no encontrará nada realmente jugoso. Sí, es un álbum sobre rupturas, amor, salud mental y salir del hoyo, pero sin ser condescendiente consigo misma. Como suelen ser los álbumes del tipo.

Como el nombre del álbum refiere, Rare, es un material de estudio extraño en el que más de un género confluye en letras simples, pero poderosas. Sin duda, Selena Gomez brilla más en sencillos que en la consistencia de un material de largo aliento. 

A pesar de que hay mucho oro en Rare, también hay mucho relleno que bien pudo haber sido cantado por cualquier artista pop del momento.

La canción de apertura y que nombra al álbum, “Rare”, es una canción pop que recuerda mucho a su single “Bad Liar”. Con una vibra tranquila, un coro pegajoso y un bajo dulce le habla a un amante lejano que no puede apreciar lo que hace única a Gomez.

"Kinda Crazy" transita entre el funky head-bob bass y las magníficas ondas de piano sin ataduras de la gravedad, mientras que "Cut You Off" se suelta con un sorprendente estallido de guitarra de blues y melodías tartamudeantes, parecidas al estilo de Beyoncé o Ariana Grande.

En “People You Know” explora la pérdida de amigo con una balada parpadeante de electro-pop, explotando en un coro repetitivo, e incluye algunas armonías sintetizadas al mero estilo de la cantautora Imogen Heap. 

A pesar de no ser un álbum bailable, canciones como “Dance Again”, “Let Me Get Me”, “Fun” y “Vulnerable” dan esta pinta, donde los ritmos ochenteros, junto al EDM e incluso un merengue digitalizado conviven en esta cornucopia de géneros.

Pero del lado de la inconsistencia que podría formar parte del repertorio de cualquier artista pop en la radio, encontramos “Crowded Room” en colaboración con el rapero 6LACK, que tiene un beat R&B amigable para la radio sin más. Por su lado, “Ring” suena a una proto versión de “Havana” de Camila Cabello, incluso con su propio “oh nanana”.

Incluso la canción en colaboración con Kid Cudi, “A Sweetner Place”, parece un intento de volver al exitazo “Wolf” en compañía de Marshmello. Pero sólo queda en un intento, así como un final de álbum bastante arbitrario, se siente que es relleno.

Así pues, Rare es una buena forma de regresar, con más canciones mediocres de lo que esperábamos, teniendo un álbum por debajo de las cinco estrellas. Algo muy común en la estadounidense, ya que desde siempre ha brillado por sus singles.

Lo que sí podemos decir es que este regreso es mucho mejor que el de Justin Bieber.