El Premio Nobel es el galardón más codiciado en las áreas en las que se otorga, ya que significa que el trabajo de la persona o de la institución hizo una contribución notable a la humanidad.
El galardón sueco comenzó a entregarse en 1901, y a pesar de la pandemia actual, los Premios Nobel no se cancelaron, sino simplemente se llevaron a cabo de manera virtual. Tal vez en algunos meses se entreguen de manera presencial.
Lo cierto es que este año, hubo una inusual presencia femenina, sobre todo en áreas donde normalmente los ganadores sólo eran hombres. Tal vez como respuesta a ciertas acusaciones en el pasado, o simplemente, ya son otros tiempos.
Así pues, veamos a los ganadores de la edición de 2020.
Premio Nobel de Química
BREAKING NEWS:
— The Nobel Prize (@NobelPrize) October 7, 2020
The 2020 #NobelPrize in Chemistry has been awarded to Emmanuelle Charpentier and Jennifer A. Doudna “for the development of a method for genome editing.” pic.twitter.com/CrsnEuSwGD
Las dos químicas Emmanuelle Charpentier y Jennifer Doudna, jamás pensaron que después de su primer encuentro en un café en Puerto Rico su vida iba a cambiar, al ser las ganadoras del Nobel de Química de este año, una cuestión sin precedentes, ya que es la primera vez que dos mujeres reciben compartiendo el galardón.
La academia sueca le otorgó el premio a las científicas por reescribir el código de la vida y el desarrollo de un método para la edición del genoma. Ya que descubrieron las tijeras genéticas CRISPR-Cas9, con las cuales pueden cambiar el ADN de animales, plantas y microorganismos con una precisión extremadamente alta.
Gracias a este descubrimiento se abre un mundo de posibilidades en cuanto a la vida molecular, desde crear nuevas terapias contra el cáncer, hasta curar enfermedades hereditarias. Se pueden crear nuevas formas de modificar los diversos alimentos, y en unos años, los transgénicos simplemente dejarán de ser viables.
Emmanuelle Charpentier es bioquímica y microbióloga francesa, especializada en virus y es una de las investigadoras más innovadoras en el ámbito de la terapia genética, que en 2002 estableció su propio grupo de trabajo y ha estado vinculada a distintas universidades de Austria y Alemania.
Por su lado, Jennifer A. Doudna es doctora en Química Biológica y Farmacología Molecular en Harvard, es profesora en la Universidad de California en Berkeley, donde también dirige la División de Bioquímica, Biofísica y Biología Estructural.
Premio Nobel de Física
BREAKING NEWS:
— The Nobel Prize (@NobelPrize) October 6, 2020
The Royal Swedish Academy of Sciences has decided to award the 2020 #NobelPrize in Physics with one half to Roger Penrose and the other half jointly to Reinhard Genzel and Andrea Ghez. pic.twitter.com/MipWwFtMjz
Este 2020, el Premio Nobel de Física fue entregado a Roger Penrose, Reinhard Genzel y Andrea Ghez tres investigadores por sus estudios sobre hoyos negros.
El primero, Penrose, obtuvo la mitad del galardón por la demostración fáctica de la existencia de los agujeros negros, siguiendo los preceptos de la teoría de la relatividad de Einstein. Los otros dos investigadores han sido distinguidos por el descubrimiento de un objeto supermasivo en el centro de la Vía Láctea, a unos 26.000 años luz de nuestro planeta.
El año pasado dos eventos sobre los hoyos negros le dieron la vuelta al mundo, la primera fue la primera imagen de uno, lo que suponía la prueba irrefutable de que existían. Aunque ya se había deducido su existencia gracias a la relatividad general de Einstein, sin ese hallazgo, antes jamás se pudo comprobar empíricamente.
El segundo fue la detección de Sagitario A*, un agujero negro supermasivo con una masa equivalente a unos cuatro millones de soles, situado en el centro de la Vía Láctea. Los expertos descubrieron una estrella que orbita a su alrededor siguiendo una trayectoria elíptica muy pronunciada. El año pasado, un equipo científico liderado por Reinhard Genzel y Andrea Ghez comprobaron empíricamente su existencia analizando las mediciones tomadas por el telescopio Keck de Hawaii durante los meses de máximo acercamiento entre el astro y el agujero negro.
Así pues, gracias al trabajo de décadas de estos tres científicos, es que ahora nos hemos acercado un poco más al entendimiento de estos fenómenos masivos.
Penrose en 1965, 10 años después de la muerte de Einstein, demostró la existencia de los agujeros negros e identificó la singularidad, es decir, una zona en la que no pueden aplicarse las leyes de la naturaleza. Este físico trabajó parte de su vida con Stephen Hawking.
Por su parte, Reinhard Genzel y Andrea Ghez lideran cada uno un grupo de astrónomos que, desde principios de la década de 1990, ha escudriñado los secretos de una región del cosmos denominada Sagitario A* de la que sospechaban podría encerrar la presencia de un agujero negro, una hipótesis que no pudieron comprobar hasta el año pasado.
Premio Nobel de Medicina
BREAKING NEWS:
— The Nobel Prize (@NobelPrize) October 5, 2020
The 2020 #NobelPrize in Physiology or Medicine has been awarded jointly to Harvey J. Alter, Michael Houghton and Charles M. Rice “for the discovery of Hepatitis C virus.” pic.twitter.com/MDHPmbiFmS
El Premio Nobel de Medicina fue otorgado a tres médicos, Harvey J. Alter, Michael Houghton y Charles M. Rice, quienes hicieron descubrimientos fundamentales que llevaron a la identificación de un virus nuevo, el virus de la hepatitis C. Aunque ya se conocía el virus de la hepatitis A y B, la mayoría de los casos de hepatitis transmitida por sangre no tenían explicación.
Por lo que su descubrimiento del tipo C reveló la causa de los casos restantes de hepatitis crónica y posibilitó análisis de sangre y nuevos medicamentos que han salvado millones de vidas. Aunque este descubrimiento ocurrió hace más de 30 años, sin duda, es un logro histórico contra la batalla contra las enfermedades virales.
Tal vez este premio está preparando el rumbo del siguiente, que posiblemente sea a los descubridores del nuevo coronavirus SARS-CoV-2, o a los inventores de la vacuna más rápida en la historia.
Premio Nobel de Literatura
BREAKING NEWS:
— The Nobel Prize (@NobelPrize) October 8, 2020
The 2020 Nobel Prize in Literature is awarded to the American poet Louise Glück “for her unmistakable poetic voice that with austere beauty makes individual existence universal.”#NobelPrize pic.twitter.com/Wbgz5Gkv8C
“Por su inconfundible voz poética, que, con una belleza austera, convierte en universal la existencia individual”, con estas razones, fue que la poeta estadounidense Louise Glück fue galardonada con el Nobel de Literatura. Quien, junto a Olga Tokarczuk, Svetlana Alexiévich y Alice Munro, es la cuarta mujer en una década en recibir el galardón.
Aunque usualmente los jurados hacen referencia a la tradición y corrientes, esta vez ha ganado la austeridad y la autobiografía que podemos encontrar en los 12 libros de poesía que la neoyorquina ha publicado.
Nieta de judíos húngaros emigrados a Estados Unidos, la nueva Nobel se crio en una casa de Long Island en la que aprendía mitología griega y leía episodios de la Biblia (su hijo se llama Noé) mientras fabricaba a mano los libros que ella misma escribía e ilustraba. Ahora es profesora en la Universidad de Yale y atesora todos los premios posibles de Estados Unidos, desde un Pulitzer hasta un National Book Award.
Un poco de poesía parece lo más sensato en estos momentos actuales, lo mejor es que muchos de sus libros están traducidos al español y podemos leer a la increíble Glück.
Premio Nobel de la Paz
The World Food Programme contributes daily to advancing the fraternity of nations referred to in Alfred Nobel’s will. As the UN’s largest specialised agency, @WFP is a modern version of the peace congresses that the #NobelPeacePrize is intended to promote.#NobelPrize pic.twitter.com/ydWmtPLIAn
— The Nobel Prize (@NobelPrize) October 9, 2020
Por último y uno de los Nobeles más queridos, es el Nobel de la Paz, este 2020 otorgado al Programa Mundial de Alimentos de la ONU, “por combatir el hambre, por contribuir a la paz en las áreas de conflicto y por su labor para evitar que el hambre sea utilizada como arma de guerra.”
El Programa Mundial de Alimentos de la ONU, en 2019, brindó asistencia a cerca de 100 millones de personas en 88 países, y aunque su fundación data de 1961 para atender las hambrunas en África, la academia sueca resaltó la contribución en la pandemia mundial. Y que si la crisis continúa, la PMA será importantísima para poder romper el círculo vicioso entre el hambre y los conflictos.