Cuando piensas en fantasía, inmediatamente piensas en cine, al menos hasta hace un tiempo. Sin duda, la serie de HBO Juego de tronos fue un golpazo, regresando a la pantalla pequeña una relevancia que ya había sido opacada por el streaming y el internet en general. 

Además de dejarnos en claro que la fantasía no sólo pertenece al cine, la revitalizó cuando creíamos que había muerto con el final de El señor de los anillos y Harry Potter, por lo que otras sagas que murieron muy rápido han regresado a las propuestas de reboot, como Las crónicas de Narnia.

Claro que después del hoyo que dejaron las ocho temporadas de Juego de tronos, sin duda, los amantes del mundo creado por George R. R. Martin se han quedado sin nada que ver cada domingo. Tal vez muchos han ocupado esta cuarentena para entender el furor de algunos años, y ahora se encuentran igual que los fans desde el capítulo uno.

Así pues, cual sea tu caso, estás vacío desde que la serie de HBO acabó, no te preocupes, que el mundo de George R. R. Martin es inconmensurable. La trama principal, Canción de hielo y fuego (nombre real de la saga de libros), son cinco libros de centenas de páginas y dos libros están en espera de terminar de ser escritos y publicados; a ellos se unen El caballero de los Siete Reinos, Dominio de dragones, Los hijos del dragón y El mundo de hielo y fuego.

Es decir, once libros (por el momento) que crean este mundo medieval en lo que todo sucede, y que a pesar de la extensión de la serie, no tomó ni siquiera la mayor parte de todas las tramas, subtramas, personajes e historias que hay dentro de este mundo que respira por sí solo.

Por ello, es que vamos a darte unas cuantas razones por las cuales tienes que leer los libros, porque aunque hayas visto tres veces la serie completa, no es una pérdida de tiempo leer la pluma de George R. R. Martin.

Es una historia compleja

Martin, inspirado en el conflicto de la corona inglesa conocido como la Guerra de las Rosas, creó un mundo similar a nuestra Edad Media, con castillos, reyes y lores, donde tienen lugar varias luchas entre las familias: Stark, Lannister, Targaryen, Baratheon, Tyrell, Martell y muchas otras. El rey Robert Baratheon, tras la sospechosa muerte de su mentor y mano derecha, Jon Arryn, busca a su amigo de la infancia, Eddard Stark, para ocupar su lugar. En medio de juegos de poder, entramados políticos y venganzas, una vieja y mágica amenaza se cierne sobre todos.

Los personajes son humanos, aunque se habla de “héroes” y “villanos” como casi cualquier historia de fantasía, la historia es muy compleja donde los malos no son tan malos, ni los buenos tan buenos. Martin siempre ha buscado hablar sobre el corazón humano y los conflictos consigo mismo.

Así pues, el autor busca que pongas atención a los detalles, a diferencia de la serie donde si hacías esto encontrabas vasos de Starbucks. “Dicen que en los detalles está el demonio” advierte en una nota al inicio de la saga, y es que el escritor no tiene reparos en llamar a ciertos personajes de la misma manera, por ejemplo, o presentarlos al inicio como meros secundarios para luego volverlos fundamentales, pasar tramas importantísimas por las sombras y después explotar en la cara de los protagonistas.

Realismo dentro de la fantasía

Cuando hablamos de Juego de tronos impera el realismo con el que Martin concibió a sus personajes, es decir, como humanos. En cualquier otra saga nos encontramos con que los héroes no mueren, siempre los salva algo en último momento, y es que el bien siempre debe de ganar. Por lo que resulta innovador que en Juego de tronos nos encontremos con que cualquier personaje puede morir, por muy héroe o principal que sea.

No por nada una de las frases más populares de la saga es Valar Morghulis (“Todos los hombres deben morir”).

Cada acción tiene consecuencias, incluso la magia parece tener también un funcionamiento lógico, para obtenerla hay que hacer sacrificios, pagar un precio.

Profundidad de la trama

Al crear personajes humanos, invariablemente nos encontramos con una trama compleja y profunda, así como personajes bien explorados y diversos. Por lo que te sorprenderá ver el verdadero rostro e intenciones de muchos de los personajes que en la serie quedaron reducidos a meras caricaturas.

De igual forma, al ser tan vasta y compleja la trama, nos encontramos con que existen muchos hoyos no contados, lo que ha hecho que los fans se entretengan al crear teorías sobre aquello que no se explicó del todo. Lo que sin duda, te dará muchas más horas de diversión si es que ya acabaste los once libros.

La pluma de Martin es preciosa

Esto lo dicen la mayoría de los fans y críticos, la forma de relatar todo, contiene un lirismo propio de poesía o canciones medievales. Por lo que un ritmo vertiginoso, pero hermoso te espera a pesar de que te esté narrando masacres. Algo muy difícil de lograr.

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