Los Premios de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de Estados Unidos, están cada vez más cerca de llevarse a cabo y de lanzar sus nominados oficiales.
Como antesala han hecho públicas las shortlists de las categorías Largometraje documental, Cortometraje documental, Largometraje internacional, Maquillaje y peluquería, Música soundtrack original, Canción original, Cortometraje de animación, Cortometraje de acción real y Efectos visuales.
Lo interesante es que en la categoría de Largometraje internacional se encuentran películas Latinoamericanas que pueden meterse dentro de las finalistas. Las tres cintas son un drama musical mexicano, Ya no estoy aquí; un documental de ficción chileno, El agente topo; y una película de terror guatemalteca, La llorona.
Veamos un poco acerca de estas tres cintas.
Ya no estoy aquí, de Fernando Frías
La cinta original de Netflix, Ya no estoy aquí, escrita y dirigida por el mexicano Fernando Frías, ocurre entre las montañas de Monterrey, y tiene como centro contextual una subcultura de la que poco se habla, los cholombianos, quienes se apropiaron de la cumbia colombiana y los unieron a los ritmos del norte.
En la cinta conocemos la historia de Ulises, un joven de 17 años apasionado por la cumbia y líder de una banda llamada Los Terkos. El joven, interpretado por el músico y actor mexicano Juan Daniel García, vive en un barrio de extrema pobreza y se ve obligado a emigrar a Nueva York tras ser amenazado de muerte.
La banda sonora es excepcional, con la cual se retrata la migración y la pérdida con una perspectiva sumamente personal. Ya ha ganado el premio a Mejor Película en el Festival de Cine de Morelia y ha obtenido 100% de aceptación en Rotten Tomatoes.
El agente topo, de Maite Alberdi
El agente topo, es una película chilena de Maite Alberdi, la cual ya es catalogada como la película más conmovedora que se ha hecho de espías y puedes verla en Netflix. Nominada a los premios Goya e Independent Spirit, es la cinta que Chile escogió para representar a su país en las principales galas que premian en cine.
Y ya alcanzó el primer gran logro, encontrarse en la shortlist de los Premios Oscar en Largometraje extranjero y Mejor largometraje documental, siendo la primera vez que una película chilena compite en la escala previa a la final de las dos categorías.
En esta cinta documental conocemos a Sergio, un espía chileno o algo parecido, ya que obtiene el trabajo después de un casting organizado por el detective Rómulo, un investigador privado que necesita a un topo creíble para infiltrarse en un hogar de jubilados.
La cliente de Rómulo, una hija de una residente, sospecha que su madre podría estar siendo maltratada, por lo que le contrata para descubrir qué es exactamente lo que está sucediendo en la residencia. Sergio, sin embargo, tiene 83 años y no es precisamente el agente 007, por lo que no resulta nada fácil entrenar a un aprendiz en lo que respecta a la tecnología y a la metodología de espionaje.
La Llorona, de Jayro Bustamante
La Llorona, cinta guatemalteca de Jayro Bustamante, es una película de terror que ya ha hecho cimbrar las premiaciones norteamericanas, ya que logró una nominación a Mejor película extranjera en los Globos de Oro y espera lograrlo en los Premios de la Academia.
La cinta, protagonizada por la actriz guatemalteca María Mercedes Coroy, usa el terror, específicamente la leyenda de la mujer que ahogó a sus hijos y cuya alma, arrepentida y maldecida, los busca llorando por las noches, para relatar un hecho verídico: el llamado genocidio maya o guatemalteco, una de las peores atrocidades en la historia de América Latina, ocurrido a principios de la década de 1980.
Aunque no se ha llevado las palmas unánimes de la crítica especializada, sin duda, se ha recalcado que su narración es lenta y fascinante, la cual mezcla el enigmático espiritualismo con los sustos a pleno gas y la furia hirviente contra la clase dominante.
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