La moda y el terror no siempre los vemos juntos, pero cuando se unen, nos regalan un festín de alta moda y sustos que te dejarán pensando. Y es que a veces las imágenes estilizadas tienen mucha más potencia que un monstruo, lo armónico nos llama la atención como humanidad, y si lo utilizamos para el mal, ¿se imaginan una película de terror hecha por Wes Anderson?

Mientras eso sucede, hablemos de unas cuántas películas de terror ambientadas y estilizadas en el mundo de la moda. Simplemente, las películas perfectas para festejar Halloween.

Deseo en una mañana de verano (Blow-up, 1966), de Michelangelo Antonioni 

El thriller de 1966 de Michelangelo Antonioni sigue a Thomas (David Hemmings), un fotógrafo de moda, que hace una pausa en su decadente rutina de salir con modelos ansiosas y andar en su Rolls-Royce cuando se convence de que accidentalmente tomó imágenes de un asesinato. 

El proceso de descifrar lo que acecha en el fondo de su serie de fotografías despierta algo en su alma dormida durante mucho tiempo y de repente encuentra un nuevo significado en su vida superficial. El cual resulta ser el objetivo de la película, ya que las respuestas que busca nunca terminan de materializarse.

Seis mujeres para el asesino (1964), de Mario Bava

Los escandalosos secretos que burbujean justo debajo de la historia de un joyero en una casa de moda boutique italiana, desencadenan una ola de asesinatos en el estilo exuberante y colorido típico del director Mario Bava de 1964. Como resultado tenemos una película tan asombrosamente hermosa como influyente.

Comienza en una noche oscura y tormentosa con el brutal asesinato de una de las modelos de Christian Haute Couture. A medida que las víctimas comienzan a amontonarse (en la escena más brutal de la película, el rostro de una mujer joven es empujado contra la rejilla de un horno al rojo vivo), la policía intenta descifrar el misterio mientras la película revela lentamente la mecánica de sus locos crímenes, construyendo para un giro final que otros thrillers han estado robando desde entonces.

El demonio neón (2016), de Nicolas Winding Refn

Nicolas Winding Refn (Drive) dirige esta hechizante pesadilla neón que se adentra en el mundo de las modelos en Los Ángeles, donde la competencia es literalmente feroz (y mucho peor). Elle Fanning interpreta a Jesse, una chica de 16 años con los ojos muy abiertos cuyos sueños de chica de portada pronto se desvían cuando se encuentra con un grupo particularmente ambicioso de amantes de la moda que están peligrosamente obsesionados con la juventud y la belleza.

El hecho de que comience con una escena “gore”, que nuestra protagonista se aloje en un motel sórdido nos da la sospecha de que The Neon Demon va a tomar un giro profundamente malévolo. Puede que sea la única película jamás realizada que hace referencia a la revista Vogue, The Texas Chainsaw Massacre y Elizabeth Báthory en igual medida.