Desde 1996, el proyecto de aventura y pop colorido de of Montreal no ha descansado. Trabajando con una larga lista de colaboradores, el autor intelectual Kevin Barnes ha pasado por un montón de diferentes épocas, disfraces y hoy estamos obteniendo uno nuevo, más o menos. El día de hoy of Montreal nos presenta el último capítulo de la racha autobiográfica de Barnes, UR FUN.   

Una colección donde Barnes nos da el gusto de seguir su singularidad con diez concisas canciones electro-pop. Es una colección que expone las profundidades de la vida actual de Kevin Barnes, sus pensamientos privados, tanto optimistas como melancólicos, y su apasionada relación con la compositora Christina Schneider de Locate S,1. 

Cada álbum se ha transformado en una creciente cadena de obras cada vez más personales. Esta vulnerabilidad aumentada ha inspirado a Barnes a despojar a su personaje del escenario de disfraces y arrastre, apareciendo como él mismo en giras recientes por primera vez en muchos años. Hablamos del sello que distingue a of Montreal de otras agrupaciones, es decir: Un verdadero torbellino de pop psicodélico en el cual cuesta quitarle los ojos de encima al cantante, compositor y en algún momento único miembro fijo de of Montreal. Barnes exorciza sus demonios con letras con vida propia sin necesidad de que haya música sonando. Es un enérgico cantante glam con poses de rockstar y un andar felino, que continuamente se presenta mediante su alter ego trans y glam Georgie Fruit. Así se cuelga la guitarra, la deja a un costado, canta como un joven Bowie, baila moviendo la cintura, salta, no se detiene ni un segundo y así invita al público a no quedarse quieto.  

Ahora y después de varios álbumes grabados con colaboradores y varios miembros de la banda, Barnes optó por grabar este completamente solo. En su estudio hogareño en Atenas, Georgia, Barnes se aisló en una hibernación creativa, trabajando obsesivamente más de 12 horas diarias organizando mapas de sintetizadores maniacos y cajas de ritmos en una pantalla de computadora, guitarras glamurosas y armonías vocales en capas. Inspirado por álbumes como She's So Unusual (1983) de Cyndi Lauper y Control (1986) de Janet Jackson, Barnes se propuso hacer de UR FUN el tipo de álbum en el que cada canción podría ser un single, con coros enormes y ritmos de baile nostálgicos. El resultado es un álbum imparablemente divertido que también podría pasar por una colección de grandes éxitos cuidadosamente secuenciada si fuera de contexto. 

Canciones como “Peace to All Freaks” y “Gypsy That Remains” (esta última con la participación de Locate S,1) representan el álbum en su mejor momento, guiados por el sintetizador pop de los años 80 y lleno de optimismo. 

Además del amor, Barnes también hace el reconocimiento necesario a la política actual (“Don't Let Me Die in America”), también toca sus propias luchas con la salud mental y las relaciones interpersonales.  

Con canciones para bailar, pelear y desmoronarse, el último esfuerzo de Montreal es un comienzo apropiado para 2020. Si bien la marca de música pop de of Montreal a menudo ha sido inteligente y detallada, estas canciones ofrecen placeres más simples. 

Fotos: https://www.facebook.com/pg/ofmontreal/photos/