La caracterización de un mundo cinematográfico muchas de las veces comienza con un vestuario, un requisito casi tan importante como los lentes que grabarán la secuencia y la locación. Lo cierto es que a pesar de tener un papel tan importante para la veracidad de una historia, para la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas de Estados Unidos sólo es reconocible cuando se habla de películas de época.

Desde la presentación de la categoría en los Premios de la Academia de 1948, Mejor Vestuario ha favorecido la cintas de época, incluida la ganadora del año pasado Mujercitas. A los votantes les encanta recompensar las fuerzas creativas detrás de este tipo de películas, haciendo especial énfasis en aquellas que tratan sobre la aristocracia, como María Antonieta, Elizabeth: La edad de Oro o Anna Karenina.

De igual manera, las cintas cuya mirada se centra a principios del siglo XX, también han demostrado ser una eficaz forma de ganar, por ejemplo, El Gran Gatsby o El artista; así como los lugares exóticos, como Memorias de una Geisha o El gran hotel Budapest.

Teniendo en cuenta las preferencias de la Academia estadounidense y sus votantes, hablemos de las películas de época (y fantasía) que han llegado a las nominaciones de Mejor vestuario en los Premios Oscar 2021, así como las probabilidades de llevarse la estatuilla a casa, según los expertos.

Emma, de Autumn de Wilde

Nominación para Alexandra Byrne

Emma es la favorita de los expertos y no fue sorpresa que obtuviera una nominación. El diseño de vestuario fue creado por Alexandra Byrne, una veterana del género de época, con trabajos tan sobresalientes y extravagantes como Elizabeth de Shekhar Kapur, con la que obtuvo una nominación en 1998, pero llevándose la estatuilla hasta 2007 con la secuela de la cinta protagonizada por Cate Blanchett.

Sin duda, su trabajo en Emma resalta por la colorida y brillante interpretación de los vestidos y gorros de la época de la Regencia, que junto a la experiencia del director de fotografía, aportaron una mirada fresca a la estética siempre seria de las adaptaciones de la escritora Jane Austen.

Byrne sería una ganadora muy merecida pero predecible, y sabemos que a la Academia en estas categorías le gusta irse por lo seguro.

La madre del Blues, de George C. Wolfe

Nominación para Ann Roth

El siguiente favorito es el trabajo que hizo para La madre del Blues de la veterana diseñadora de vestuario, Ann Roth, quien cumplirá 90 este año. Ella ya se ha llevado estatuillas a casa, con The English Patient en 1998, y tiene el récord de ser la nominada más antigua entre la gama actual en la historia de los Oscar. La cinta de George C. Wolfe se desarrolla en la década de 1920, lo que da muchos puntos de bonificación dentro de los gustos de la Academia, además de su impecable adaptación de la Edad del Jazz.

Un vestuario que incluye vestidos de cuentas, pañuelos flapper, vestidos de terciopelo de colores para Viola Davis, pero también una increíble caracterización para las estrellas masculinas. Sin duda, una cinta que está pisándole los talones a la favorita.

Mank, de David Fincher

Nominación para Trish Summerville

Otro de los gustos de la Academia estadounidense es el glamour de la época clásica de Hollywood, por lo que no podíamos esperar menos que encontrar a Mank entre las nominaciones. Esta aura majestuosa de los años 40 no pudo llevarse a cabo sin el trabajo de Trish Summerville, una colaboradora recurrente de David Fincher. Parece que trabajan muy bien ya que el director es conocido por ser notoriamente exigente y llevan 10 años colaborando. Por ello, es que el drama llegó lujosamente y cuidadosamente a la esperada nominación.

Destaca con las estrellas Amanda Seyfried, Lily Collins y Tuppence Middleton, todas apareciendo en una serie interminable de deslumbrantes vestidos drapeados y delicadas blusas de seda, que se adecuan perfectamente a la estética apagada de la cinta. Sin duda, Summerville se lleva las palmas por la elección de colores que quedarían perfectamente con el blanco y negro.

Mulan, de Niki Caro

Nominación para Bina Daigeler

Los expertos, sin miedo a equivocarse, han dicho que Mulan simplemente fue nominada a esta categoría por el espectáculo, uno muy apropiado teniendo en cuenta el presupuesto de 200 millones de dólares, los cuales no repararon en gastos en lo que respecta a los diseños magníficamente realizados de Bina Daigeler. 

Ya sea por la elaborada armadura y el atuendo de batalla que lució Liu Yifei, actriz que interpretó a Mulan, así como los que lucieron sus compañeros de lucha o las túnicas medievales inspiradas en la dinastía Tang que usaron para las piezas cortesanas, el deslumbrante vestuario sirvió como un punto culminante indiscutible de una película que de otra manera resultó divisiva entre los críticos.

Sin duda, el vestuario fue de las pocas cosas de la película que no tuvieron peros para la crítica.

Pinocho, de Matteo Garrone

Nominación para Massimo Cantini Parrini

Llegando a la cinta que menos probabilidades tiene de ganar, según la crítica que la llaman el relleno de la categoría o el comodín, encontramos a Pinocho, cinta de 2019 del italiano Matteo Garrone, quien contó con el trabajo de Massimo Cantini Parrini para crear el mundo surrealista que quería en esta cinta.

Una cinta que merece estar aquí, ya que sin el vestuario no podríamos lograr la inmersión profunda y extravagante que Garrone quería en su versión del clásico infantil, la cual no duda en meterse de lleno en los rincones más oscuros de la imaginación de los cuentos de hadas. Una oda a la fantasía pura que claramente todos necesitamos en estos tiempos donde las dosis de escapismo son muy necesarias.

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