28 mar 2022
Los Premios Oscar se llevaron a cabo este domingo 27, y si algo había adolecido la gran fiesta del cine en Estados Unidos en los últimos años, era de un rating como en los viejos tiempos. Tal vez debido a que es una premiación muy larga, que no tuvo presentadores en bastante tiempo, y la pandemia lo afectó (como al resto de entregas de galardones).
Sea como sea, después de que en 2021 los Premios Oscar acabaran de la forma más anticlimática posible, los productores decidieron que estos premios serían mucho más efervescentes que los anteriores.
Y aunque suene contradictorio, que la chachetada de Will Smith a Chris Rock haya sucedido en esta edición, hizo que todos miráramos a ese incidente, en vez de hablar de las decisiones que tomaron la Academia para “agilizar” la premiación.
Comenzando con la decisión de entregar ocho premios Oscar incluso antes de que comenzara la ceremonia y cortar los discursos de aceptación editados durante la transmisión. Diseñado en principio para mantener el espectáculo ágil y reemplazar los discursos, pero esta decisión dejó a estrellas como Hans Zimmer, quien ganó Mejor Banda Sonora por Dune, relegado a unos minutos en la premiación.
Lo contradictorio es que estos Premios Oscar resultaron más largos que la versión llena de discursos del año pasado. Tanto Guillermo del Toro como críticos han opinado que comenzaron con el pie izquierdo y no volvieron a recuperarse.
Thank you to @TheAcademy, but most importantly, to all the @DuneMovie musicians and our leader Denis Villeneuve. pic.twitter.com/XbVBYJ8dHY
— Hans Zimmer (@HansZimmer) March 28, 2022
Otra situación que no hizo gracia a los espectadores habituales, fue la necesidad de los Premios Oscar de autocelebrarse utilizando el éxito de Encanto, “No se habla de Bruno”, en vez de darle protagonismo al cine del año pasado. Suena bastante lógico, pero no tanto para la Academia.
Así, ajustaron la letra para que dijera “finalmente es la noche de los Oscar / estamos aquí para celebrar los Oscar”, y bueno, una decisión que no pueden sólo asumir como un “fallo técnico”.
Y es que cuando Drive my car, de Ryusuke Hamaguchi ganó el premio a la Mejor Película Internacional, el director apenas tuvo 20 segundos para hacer su discurso de aceptación y lo dejó prácticamente rogando por más tiempo para terminar su agradecimiento.
Un error de producción que también se repitió durante el emotivo discurso de aceptación de Questlove por el premio al Mejor Documental, Summer of Soul.
Los Premios iban bastante “normales” cuando el Smithgate sucedió, Will Smith subió al escenario y abofeteó al presentador Chris Rock después de una broma sobre la alopecia de su esposa, Jada Pinkett Smith, antes de maldecir al comediante en la televisión en vivo. Esto logró que la vibra de festejo se esfumara, llevando a los Oscares a lo más temido en televisión en vivo: un silencio espeluznante.
Efecto que hasta en nuestro hogar pudo sentirse. Y vaya que duró bastante, la situación absorbió la vida de la transmisión hasta tal punto que incluso la presentadora Amy Schumer lo reconoció más tarde, “¿Yo me perdí algo?”, dijo inexpresiva. Y concluir con un “El ambiente es diferente aquí.”
Casi lo más incómodo y raro que ha sucedido en los Premios Oscar en los últimos años, después del derechazo siguió “el manejo de los productores”, así como el posterior discurso de aceptación. Vamos, unos niveles de cringe estratosféricos que no se sentía desde que el error con La La Land, o cuando Seth MacFarlane fue el anfitrión.
Los Oscars alcanzaron un nuevo fondo. Cabe recalcar que aún no se sabe cómo terminará este culebrón digno de Laura en América, pero ya se ha corrido la voz de que obligarán a Smith a devolver su estatuilla por ir en contra de las reglas de los Premios Oscar.
A pesar de estos tropiezos, no podemos dejar de lado que este 2022 galardonó a Jane Campion a Mejor dirección gracias a El poder del perro. Por segundo año consecutivo, una mujer se lleva este galardón.
De igual manera, la gen z tuvo su propio show con la aparición de Billie Eilish para interpretar “No Time to Die”, y luego subir al escenario para llevarse el premio a la Mejor canción original en compañía de su hermano.
De igual manera, hubo algunos discursos de aceptación más que memorables, especialmente de los ganadores de la Mejor Actuación de Reparto, Ariane DeBose y Troy Kotsur. Mientras que la diseñadora de vestuario Jenny Beavon ganó por Cruella, también hubo algo de dulce justicia: la londinense había sido infamemente ignorada por algunos grandes nombres en la audiencia cuando ganó por Mad Max Fury Road.
Y aunque no era lo que esperábamos, CODA se llevó el premio a Mejor película de la noche, presentado por Lady Gaga y Liza Minelli, quienes compartieron una serie de palabras llenas de aliento y complicidad que nos calentaron el pecho.
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Por si fuera poco, nos confirmó un nuevo color de esta temporada, el rosa palo o durazno. Media alfombra rosa llevó tonalidades de este rosa, desde Lily James, llamando la atención con un elegante vestido de encaje y gasa de Versace.
La estrella Pamela Anderson combinó su vestido con corsé con una gargantilla de diamantes. Nicky Hilton Rothschild y Zuri Hall de NBC también optaron por vestidos románticos. Incluso Sebastián Yatra llevó un traje de tres piezas de Moschino de este color.
Sin duda, el color de la elegancia para esta temporada. Gracias Premios Oscar.
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