En la secuela de su aclamado álbum Reprise (mayo de 2021), su debut en Deutsche Grammophon, que contaba con artistas invitados como Kris Kristofferson, Mark Lanegan, Jim James y Skylar Grey, Moby reimagina y orquesta quince de sus temas más icónicos escritos o grabados en Nueva York entre los años 1994 y 2010, con cantantes invitados entre los que figuran Gregory Porter, Ricky Wilson (Kaiser Chiefs), Margo Timmins y Amythyst Kiah.
Mientras que muchos de los cantantes son nombres muy conocidos, otros resultan menos familiares: Moby descubrió a P.T. Banks cantando en una banda que actúa en bodas en Texas, mientras que el anciano padre de Danielle Ponder, la cautivadora cantante de soul, se une a ella en el remake de “Run On”.
El vigésimo álbum de estudio de este pionero musical constituye un reflejo de la que es quizá la época más definitoria de la vida musical de Moby, que son los años en que estuvo en activo en en Nueva York.
Moby nació en Nueva York y comenzó su carrera musical tocando en bandas de punk rock y trabajando como DJ en clubes underground en y en los alrededores de Nueva York.
Después de estar en activo como DJ y realizar giras durante los años noventa, su álbum Play de 1999 no fue sólo un gran éxito comercial, sino que se convirtió en un fenómeno global. Moby ya había triunfado con temas como “Go”, “Feeling So Real” y su versión del “Tema de James Bond”, y le habían pedido que hiciera remezclas de todos, de Michael Jackson a Freddie Mercury, pero el extraordinario éxito de Play lo cambió todo. Cuando nos adentrábamos en un nuevo milenio, Moby cambió el rumbo de la música electrónica.
“Antes de que descubriera el punk rock, crecí con el rock clásico”, dice Moby. “Mi primer concierto fue uno de Yes en el Madison Square Garden en 1978. De modo que fue superabsorbente revisitar mis canciones y ver si resistían un enfoque más tradicional, orquestal y no electrónico”.
Revisitar su pasado al tiempo que reimaginaba su futuro ha dado como resultado Resound NYC, un álbum lleno de música apasionante, una reelaboración clásica de canciones definitivas y definidoras de una época, que nos recuerdan una vez más el increíble alcance y la relevancia del talento musical de Moby. (La versión original de “When It’s Cold I’d Like To Die” se incluyó recientemente en el final de la serie de Netflix Stranger Things.)
“Una orquesta puede ser cualquier cosa que el compositor quiere que sea”, dice Moby. “De modo que, más que someter a todas las canciones al mismo tratamiento orquestal, construí de algún modo un enfoque orquestal a medida para cada canción”.
Con Resound NYC, Moby recapacita no sólo sobre la evolución de su propia obra, sino también sobre un tiempo, un lugar, e incluso sobre una transformación en nuestro mundo:
“Cuando pensamos en los años noventa”, dice, “Bill Clinton era el presidente; el mundo de la música rave era algo utópico, idílico; la Unión Soviética había llegado a su fin; el cambio climático era tan solo una idea para un libro que iba a escribir Al Gore. Por aquel entonces, hacer música era una celebración del potencial que poseía nuestro mundo, que poseía nuestra cultura. Y ahora es casi un refugio dentro de un mundo en ocasiones aterrador y apocalíptico”.
Información: UMusic