En esencia, Minecraft: Dungeons conserva el estilo y la estética del Minecraft que todos conocemos: los cubitos seguirán llenando nuestra pantalla, hablamos de un spin-off que sustituye las construcciones y la creatividad del título original por una aventura de acción para toda la familia. 

Minecraft Dungeons ha sido desarrollado por un pequeño equipo de Mojang, el estudio sueco responsable de este universo virtual, y es lo que dentro del mundo del videojuego se conoce como un “dungeon crawler”, es decir, un título que combina combates y exploración y en el que los jugadores deben recorrer calabozos y otros escenarios acabando con enemigos y buscando tesoros. La principal diferencia respecto a otros representantes de este género, está en su colorista y cúbica ambientación, pero también en el hecho de ser un juego pensado para todas las edades. 

Ahora, nuestra misión es sobrevivir, pero la temática del juego consiste en la lucha constante contra enemigos bastante afamados del Minecraft que conocemos. Esta vez, el juego nos ubicará en una serie de calabozos donde hay que poner en práctica nuestra estrategia y habilidad para deshacernos de un montón de creepers, zombis y demás aberraciones que en más de una ocasión nos generaron todo tipo de problemas en nuestra aventura cuadrada.  

La historia es simple, pero encantadora. Los desarrolladores optaron por crear una historia libre de complicaciones. El juego gira en torno a un villano que siempre fue rechazado, hasta que un día cayó en sus manos el orbe del dominio. Ahora es un tirano que hace que todos le hagan reverencias. Tu misión, en el rol del héroe, será detenerlo. A lo largo del juego se mantiene más o menos la misma mecánica, sin alternar con escenas cinemáticas que afecten la historia. 

Por supuesto, toda esta nueva experiencia subirá de nivel ya que estará habilitado el modo cooperativo. Allí podrás jugar con los mejores amigos y estar todos juntos en un mundo que pondrá a prueba el trabajo en equipo. Esto también permitirá que subamos el nivel y experimentemos la lucha en modos extremos de combate que, en solitario, son prácticamente imposibles de rescatar. 

Lo primero que tendrás que hacer es elegir un personaje. Aunque en este caso no podrás crear tu propia skin, cuentas con múltiples opciones para escoger. Una vez comenzada la partida, pasarás casi todo tu tiempo combatiendo, en lugar de dedicarte a la minería y a la construcción que caracterizan al juego original.