“Describe una visión de un mundo virtual 3D conectado, donde los mundos real y digital se integran utilizando tecnologías como la realidad virtual (VR) y la realidad aumentada (AR). A este universo virtual se podrá acceder a través de dispositivos como gafas de realidad virtual o realidad aumentada y aplicaciones para teléfonos inteligentes”, cuentan los expertos cuando hacemos la incómoda pregunta de qué es el metaverso.
Tal vez los fatalistas de la ciencia ficción, aquellos amantes del futuro decadente y depresivo no estaban tan errados al pensar en una sociedad alienada, que vive a través de aparatos electrónicos, sin darse cuenta que cada vez están más solos…
Bueno, si somos sinceros parece que llevamos unas décadas viviendo en esta realidad. Incluso las gabardinas de piel y las de detective volvieron a ser tendencia, así que poco falta para escuchar la banda sonora de Blade Runner mientras caminamos por las sucias calles de nuestra ciudad.
Fuera de bromas, la pandemia nos ha distanciado y nos hemos refugiado en nuestros teléfonos celulares, nada que no hubiera pasado, pero ahora no fue por decisión. Y aunque cada humano tuvo una respuesta distinta al mismo estímulo, lo intangible está a la orden del día.
Desde las criptomonedas, pasando por los NFTs y hasta llegar a la compra de terrenos virtuales en distintos metaversos, nos hace preguntarnos si realmente es así cómo se siente ser un personaje de Wall-E. Aunque las empresas juran y perjuran que lo que queremos es un NFT (hasta el k-pop está invirtiendo en ello), parece que realmente sólo muy poca gente está interesada en estos tokens no fungibles.
Aunque en occidente poco revuelo se le ha dado, uno de los fandoms más grandes de k-pop, Army, tuvo intentos de boicotear la empresa de BTS por querer vender NFTs. En vez de detener al resto de empresas coreanas, poco a poco otras se han sumado a estas propuestas, desde YG Entertainment, pasando por SM Entertainment, e incluso Cube Entertainment, una empresa más pequeña que el resto nombradas.
Así que la pregunta prevalece, ¿por qué los millonarios continúan invirtiendo en “cosas” que a muchas personas no les interesa?
Visión a futuro, según los expertos, algo que parece que un ciudadano a pie no termina de comprender, “Los tecnólogos predicen que el metaverso madurará hasta convertirse en una economía en pleno funcionamiento en los próximos años, además de una experiencia digital sincrónica tan ligada a nuestras vidas como lo están ahora el correo electrónico y las redes sociales.”
Lo comparan con las dudas del potencial del internet y las redes sociales. Y aunque vivimos desde hace bastante tiempo en una doble realidad, incluso nos sentimos engañados por ello al punto de que afecta nuestra vida diaria, las tendencias de la sociedad se inclinan más por el autoconocimiento y la identidad, más que los sueños tecnológicos que los millonarios tienen.
Si somos sinceros, los millonarios están actuando de la misma manera que los países ricos en los albores de la civilización: conquista de territorio. Estamos presenciando un enfrentamiento bélico por espacio físico, e incluso la Segunda y Primera Guerra Mundial sucedieron porque Alemania quería más territorio.
El territorio físico cada día es más complicado de obtener, por lo que ahora el “futuro” es esta necesidad de continuar poseyendo espacios. Esta vez no son físicos, sino casi como feudos virtuales.
Tal vez Ready Player One o incluso The Matrix no estaban tan alejados de la realidad. Sólo queda observar lo que viene para nosotros como humanidad.
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FOTO: Martin Sanchez on Unsplash