Todavía no conocemos del todo los mecanismos que regulan nuestra memoria, pero sabemos que hay factores que ayudan a reforzar los recuerdos o que actúan como un interruptor para ayudarnos a evocar información con distintos fines.  

Existen investigaciones que demuestran que cuanto más se ejercita la memoria, mayor es la capacidad para aprender cosas nuevas. También ofrece la posibilidad de reutilizar experiencias mientras le da continuidad a nuestras historias. Con esto en mente, bien podemos recordar darle una merecida atención a la memoria.

Uno de los métodos más empleados para memorizar grandes cantidades de texto o palabras, es la mnemotecnia (o memoria technica). Este método consiste en relacionar palabras con experiencias, significados, letras, etc, haciéndolo más ameno y práctico.  

Esta técnica de aprendizaje ayuda a la retención de la información, pero también a la memoria y su nombre viene del griego mnēmonikos, vinculándose a la diosa griega de la memoria, Mnemósine. 

Existen distintos tipos de mnemotecnias, como la musical, aprendiendo información vinculándola a la música; de nombre, como los acrónimos; de palabras, haciendo una frase con palabras cuya primera letra nos ayude a recordar ciertas cosas. Se suman otras que usamos continuamente: de modelo, usando diagramas, gráficas, o similares; de oda en forma de poemas y de organización de notas, usando tarjetas y listas de información. A esto sumemos las imágenes, de conexión, de deletreo, de visualización.

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Ya sea que necesitas prepararte para un examen, o porque te interesa mantener ese conocimiento en tu cerebro durante mucho tiempo, esta técnica de estudio te ayudará a retener información de forma eficiente. 

Método del relato o la historia 

Esta técnica se basa en la creación de una historia con todas las palabras que memoricemos para recordarlas en otro momento. Este relato no suele tener mucho sentido, pero al aparecer todas las palabras a estudiar, es más sencillo retenerlas en la memoria. 

Para realizar esta técnica, primero escribe las palabras que necesitas recordar. Por ejemplo, para memorizar las palabras perro, azul, rojo, collar y casa, crearemos una historia en la que aparezcan estas palabras, como es la siguiente: El perro estaba muy contento, había salido de casa con su collar rojo para pasear con su dueño, en un día donde el cielo estaba muy azul. 

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Mnemotecnia de palabras clave 

Este truco se aplica sobre todo para el aprendizaje de vocabulario en otros idiomas. Consiste en vincular la palabra que queremos aprender a otra que se le parezca fonéticamente en nuestro idioma –aunque no tengan nada que ver– e imaginar una escena que la asocie con el significado de la palabra que queremos aprender. 

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Técnica de loci (lugar) 

¿Te suenan las expresiones: "en primer lugar, en segundo lugar..."? Provienen de esta regla mnemotécnica. Es una técnica que utilizaban los griegos para preparar exposiciones. 

Consiste en asociar la información que quieres memorizar con imágenes, objetos o personajes colocados en varios lugares que conoces perfectamente y en un orden concreto. 

La técnica es similar a cuando armas una maleta, debes recordar dónde sitúas los zapatos y todos los accesorios como ropa y demás.  

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