La cafeína (siempre con medida) puede prevenir la muerte por distintas enfermedades ya sea diabetes, enfermedades del corazón o incluso derrames cerebrales. Además, se ha demostrado que esta bebida tan necesaria por la mañana aporta otros beneficios y es que reduce las probabilidades de padecer Alzheimer, enfermedades del hígado, diabetes tipo 2 y cáncer, y también se ha asociado a un menor riesgo de sufrir depresión. 

“No funciono antes de tomar café en la mañana”, “aun ni tomo mi café y ya iniciaron los problemas”, esta y muchas otras frases son repetidas una y otra vez por los adultos agotados del mundo, pero no se trata solo de tomarlo porque da energía, sino por su sabor y por el placer que sentimos al dar el primer trago de esa bebida caliente que llena cualquier lugar con el mejor aroma. 

Un estudio publicado en el periódico científico Physiology & Behavior, afirma que al tomar una taza de café se origina un proceso térmico que dura aproximadamente tres horas, y el gasto de energía aumenta un 16%. El incremento de la energía gastada cuando tomas café puede generar la quema de grasa, pero la termogénesis no es la única razón por la que el café puede ayudarte a perder peso. 

Y también es bien conocido que el café es una de las bebidas que más ha inspirado a los compositores musicales. Bob Marley se conformaba con un trago caliente y dulce para recordar un abrazo de amor, mientras que Bob Dylan organizaba su siguiente aventura “On the road again” acompañado siempre de una taza. Ejemplos entre muchos otros que celebran el universo de esta esencial bebida. 

Johnny Cash - “A cup of coffee” 

Elvis lo era al Rock, Michael al Pop y Johnny lo fue al Country. Cash fue conocido por su profunda voz, por el característico sonido de su banda de acompañamiento (los Tennessee Three), y por vestir ropa oscura lo que le valió el apodo de “El Hombre de Negro”. En 1966. Johnny Cash le dedicó una canción al café en su álbum Everybody loves a nut. 

Esta canción se acerca más al country que al rock, aunque cualquier tema interpretado por Cash siempre tiene un dejo rockero inconfundible, y hace referencia a un viaje por carretera. Lo que no tenemos claro es el destino del viaje, pero aun así escucharla nos transporta a las lejanas carreteras del oeste americano. 

The White Stripes – “One more cup of coffee”  

La canción original es del gran Bob Dylan, pero esta versión en vivo de The White Stripes nos ha cautivado, por su intensidad. La letra habla de un amor no correspondido: una chica tan especial como inalcanzable. ¿Qué pide el autor? Solo tomar una taza de café (con ella) antes de irse. 

Blur  - “Coffee & TV” 

Este tema de los británicos Blur tuvo cierto éxito en su momento, pero lo que ha hecho que pase a la historia de la música es el videoclip, protagonizado por un simpático cartón de leche. Ganó múltiples premios, entre ellos el galardón MTV al mejor video musical en el 2000, y aún hoy se considera uno de los mejores videoclips de la historia.  

Johann Sebastian Bach - “La cantata del café” 

En el año 1732 compuso “Schweigt stille, plaudert nicht, BWV 211”, también conocida como “la Cantata del café”, la cual técnicamente es una composición clásica más que una canción moderna, pero es también una de las más interesantes de la lista. Bach trata la adicción al café en esta pieza vista de forma humorística. 

Es la historia de un padre que prohíbe tomar café a su hija y para convencerla le amenaza con que no le comprará más ropa, y no le permitirá salir de casa, ni siquiera podrá mirar la calle desde la ventana. 

Esta canción es una clara prueba de que el café no entiende de estilos musicales, no hace distinciones y puede gustarle a cualquiera.

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