Los conciertos online se han vuelto sumamente populares, pero también han sido polémicos. Mientras que muchas personas están dispuestas a verlos para apoyar a sus artistas favoritos que tocan desde sus trincheras, hay quienes se rehúsan a disfrutarlos debido a que aseguran que no valen la pena. No obstante la mayoría ofrecen sus boletos virtuales a un precio accesible, incluso aseguran un buen audio y calidad de video    

Más allá de los instagram o facebook live o las colaboraciones masivas entre artistas en diferentes partes del planeta, no podemos negar que la verdadera revolución musical en la actualidad ha sido la de los conciertos digitales. Una mezcla entre realidad virtual y propuesta visual que ha visto en los últimos días un progreso sin precedentes, rompiendo las limitaciones técnicas y creativas que se consideraba existían hasta hoy. 

Eventos como “Fortnite X Travis Scott's”, que involucró a más de diez millones de jugadores o el "Block by Blockwest" de Minecraft, un festival con más de 30 artistas, pueden darnos pistas sobre hacia dónde va la relación entre la música y la tecnología. 

Tal vez el aspecto más importante detrás de este crecimiento de los conciertos digitales está en haber desarrollado una experiencia que tome elementos característicos del show en vivo y los lleve a otros formatos en una plataforma completamente nueva para la industria.  

El ejemplo más claro a todo lo anterior nos lo ha regalado Gorillaz y Björk, quienes han probado diferentes tecnologías a lo largo de los años. Por otro lado, los "hologramas" aparecieron en el panorama como una gran tendencia en el hip-hop cuando Tupac Shakur se unió a Snoop Dogg en el escenario en el Festival de Música Coachella 2012. 

Si revisamos cuál es el elemento más potente de las presentaciones en vivo, la interpretación de instrumentos ya no es suficiente y por ello la música electrónica ha crecido de manera importante. El elemento fundamental es el sentido de comunidad que se eleva al nivel de comunión entre quienes presenciaron juntos “en vivo” la misma experiencia, que se convierte en un evento en su vida. 

Por ahora, crear un concierto como el de “Fortnite X Travis Scott's” requiere un equipo robusto de desarrolladores y tiempo para ejecutarse. Significa que los sellos discográficos que quieran seguir siendo competitivos deberán invertir ahora o por lo menos tener estos formatos en la mira. 

Sin duda estas experiencias catapultaron los conciertos digitales y el entretenimiento al siguiente nivel tanto en formatos como en alcance, brindando un espacio para la innovación y la experimentación.