Es miércoles 16 de julio de 1969, son las 12:32 horas en la estación de la NASA en Kennedy Space Center y el Apollo 11 despega con la tripulación que carga con el mundo sobre sus hombros, para llevarlo a nuestro satélite nocturno natural. Los científicos a cargo de los controles en la Tierra y miles de personas saltan de la emoción, porque este evento reunió a más de 33 países, tres mil 500 periodistas de 55 países diferentes y rompió toda clase de fronteras para presenciar un momento con el que hemos soñado desde la edad de piedra.
La curiosidad por saber qué hay más allá de nuestra atmósfera nos ha habitado desde el principio de los tiempos. Nuestros ancestros miraban el cielo y no entendían el porqué de un montón de fenómenos astronómicos que hoy en día nos parecen obvios. Pero no se nos olvide que, a pesar de ya tener más idea sobre dónde estamos y que hay más allá de nuestra atmósfera, apenas estamos en el kínder de todo lo que el universo tiene para enseñarnos.
Piénsalo, apenas conocemos un cinco por ciento de nuestros océanos, estando ellos en nuestro propio planeta. Aunque bueno, algo sí es cierto, y es que quizá conozcamos un poquito de lo que hay afuera, allá en el universo, más o menos de que lo que tenemos debajo de nuestros pies y nuestros inmensos mares no lo sé, sí que aún nos queda mucho por descubrir y entender.
Foto: NASA
Este año, en estas fechas, se cumplen los 50 años de la llegada del hombre a la Luna, un evento histórico que nos marcará por siempre. Fue el 16 de julio de 1969 cuando el cohete Saturno V de Apollo 11 estaba preparándose para emprender el viaje más importante para nuestra memoria, los hombres a cargo de esta misión fueron Neil Armstrong, Buzz Aldrin y Michael Collins.
Son las 16:16 y el Apollo 11 comienza la maniobra de transposición de acoplamiento. Al mismo tiempo, el módulo lunar se separa de la fase de lanzamiento de su vehículo y se une al módulo de mando y servicio mientras sigue este largo viaje. Una hora después, Neil Armstrong comenta: “Houston, puedo ver todo el continente de Norteamérica, Alaska, el Polo, la Península de Yucatán, Cuba, el norte de Sudamérica y me quedo sin ventana”.
“Aunque las vistas de cerca de esa luna alienígena eran impresionantes, no se podían comparar con las de la diminuta Tierra. La Tierra era el espectáculo principal”, afirma Michael Collins cincuenta años después del evento.
A las 18:55 la tripulación le desea un feliz cumpleaños al Dr. Mueller por su 51 aniversario, él fue el director del departamento de vuelo tripulado. Al día siguiente, 17 de julio de 1969, Michael Collins pronuncia las siguientes palabras: “La vista es alucinante. Hace un minuto, en la maniobra, he visto el Mediterráneo. Todo el norte de África, nítido; Portugal, España, el sur de Francia, Italia. Una vista preciosa”.
Buzz Aldrin, el segundo hombre en pisar la Luna ya había visitado el espacio anteriormente, en 1966 cuando estuvo a bordo de la Gemini XII, este vuelo duró cuatro días y orbitó 59 veces alrededor de la Tierra.
Es 17 de julio a las 16:59 y Lovell, capitán suplente de la misión, le pregunta a Buzz qué se siente estar nuevamente en el espacio y él dice que el Apollo 11 es una nave más grande que Gemini XII, y Armstrong bromea: “en este vehículo todo está al lado de todo”.
Ese mismo día a las 20:23 la tripulación parece estar un poco aburrida, y Michael Collins intenta correr en la nave y pregunta: “¿hay médicos en Control de Misión? Me pregunto, por curiosidad, si intentar hacer ejercicio en el espacio aumenta mis pulsaciones”.
A las 22:25 la misión está a la mitad de su viaje. Al día siguiente, 18 de julio, la tripulación continúa con el gran viaje y transmiten a la televisión el interior de la nave.
Es 19 de julio a las 14:01, es el cuarto día de la tripulación fuera de casa. Leen las noticias más destacadas del día y llama la atención que el periódico soviético Pravda, enaltece a la misión y llama a Armstrong “El zar de la nave”.
Por lo que Collins bromea sobre el nuevo rango que le han puesto a Neil y dice: “el Zar está lavándose los dientes, así que le sustituyo”.
Son las 17:21 y la tripulación del Apollo 11 enciende los motores para entrar en la órbita de la Luna. La misión empieza a acercarse a su culminación. Veinte minutos después, 17:47, Neil, Collins y Aldrin ven por primera vez la salida de la Tierra sobre el horizonte de la Luna, (no puedes dejar de ver este video 4:17:00)
Foto: NASA
A unas horas de pisar por primera vez la superficie de la Luna, Armstrong dice que “no hay nada que pueda sustituir estar aquí”.
A las 78 horas de viaje, siendo ya 20 de julio, la tripulación está a punto de hacer historia para siempre. Es momento del descenso, uno muy crítico, en el que casi se quedan sin combustible, Neil y Buzz aterrizaron en la superficie de nuestro satélite.
“Houston, aquí base tranquilidad. El Águila ha aterrizado. Un pequeño paso para el hombre, pero un gran paso para la humanidad”. Fueron las primeras palabras que se pronunciaron sobre la superficie de la Luna.
Al momento en el que los dos primeros seres humanos en pisar la luna, colocaron una bandera de Estados Unidos junto con una placa que dice: “Aquí, unos hombres del planeta Tierra pisaron por primera vez la Luna en julio de 1969 d.C. Vinimos en son de paz en nombre de toda la humanidad”.
Mientras tanto, recordarás que eran tres los tripulantes, pues sí, Collins tuvo que quedarse a cargo de la nave mientras sus compañeros vivían la experiencia de pisar una superficie alienígena, pero gracias a él todos pudimos contar este suceso como una victoria y no como una tragedia en la que dos hombres se perdieron en nuestro satélite lunar.
Foto: NASA
Michael Collins quedó detrás de la Luna, completamente solo, pero él confirma que en realidad no se sentía tan solo, “había tres mil millones de personas, más otros dos al otro lado. Me sentía muy a gusto ahí detrás, incluso me bebí un café”.
Cuatros días después, el 24 de julio de 1969 la tripulación regresó a casa y aterrizó en el Océano Pacífico.
Para escuchar las grabaciones en tiempo real desde el día del despegue hasta el día del alunizaje, ingresa aquí, y descubre todo lo que hubo detrás de este magnífico evento por ti mismo.
Sin duda, esta aventura nos marcó y seguirá marcando a través de las generaciones, este evento continuó inspirando el talento de diferentes artistas para trascender en su obra de manera única.
Si eres un fanático del espacio y piensas que estas cosas merecen celebrarse, podrías hacerlo con el maratón lunático de películas sobre la luna o escuchando el álbum The Race For Space de la banda Public Service Broadcasting, quienes utilizan grabaciones reales de este magnífico evento para sus mezclas o también podrías escuchar a Sleeping At Last con su álbum Atlas: Year One, en el que nos da un recorrido por nuestro sistema solar y las emociones humanas.