Pedalear ha hecho que más de un ciclista sienta que llega a las nubes, y no por nada las bicicletas se han convertido en el medio de transporte más popular. Incluso a raíz de la pandemia el uso de ella se incrementó en un 221% en nuestro país, según los datos confirmados de la Secretaría de Movilidad. 

Además, no podemos negar que se trata de un medio de transporte que nos beneficia a todos de manera horizontal. Mientras ayudamos a la disminución de contaminantes para el planeta, beneficiamos nuestra salud al utilizarla. 

Porque más allá de cualquier tecnología grandilocuente que exploramos hoy en día, con los automóviles eléctricos, híbridos y demás en pro del cuidado ambiental, también es verdad que los clásicos nunca mueren. 

Si bien, desde la voz de la experiencia como ciclistas urbanos podemos comparar el pedaleo con el aleteo, también pensemos en quienes apenas están aprendiendo. Pues muchos, quizá, tuvimos la fortuna de hacerlo desde nuestras infancias. Sin embargo, hay quienes apenas lo están intentando y seguramente sufren con el tema del equilibrio, y vaya que es un requisito fundamental. 

De esta manera, el ingeniero chino, Zhi Hui Jun, ha inventado la solución perfecta a este problema. Presentó una bicicleta eléctrica que mantiene el equilibrio por sí sola, y además tiene inteligencia artificial para moverse por la ciudad de manera autónoma. 

¿Estamos en el futuro? Hoy quedan muy lejanos los carros voladores y cualquier cohete capaz de llevarnos a Marte, cuando el transporte más de antaño ha resultado sumarse a la nueva narrativa futurista. 

Aunque todavía se trata de un prototipo, resulta un invento bastante innovador que ya todos queremos ver en el mercado. Además, cabe destacar que esta bicicleta es una creación que nació en los tiempos libres del ingeniero Hui Jun. 

Esta bicicleta consigue mantenerse equilibrada gracias a una rueda de meta perpendicular que es capaz de cambiar rápidamente la dirección de su giro para crear un momento angular que contrarresta la tendencia de la bicicleta a caer hacia un lado. 

¿Cómo se controla? Gracias a sus acelerómetro y giroscopios, capaces de detectar hasta los más nimios movimientos de la bicicleta, es que esta logra mantenerse en pie y funcionar independientemente de que haya o no un ciclista al mando. 

Además, esta bicicleta tiene una cámara de detección de profundidad RGB y un sensor LIDAR, mismos que permiten, además de que se mueva sola, evitar obstáculos y circular entre el tráfico de manera inteligente y segura. 

Una de las utilidades que podemos imaginar con este tipo de bicicleta es la entrega de paquetes de manera autónoma y de manera eficaz y rápida. ¿Qué vendrá después? Esperemos, antes que nada, que algún día podamos ver este transporte en el mercado y que sus utilidades vayan más allá de ayudar a los ciclistas principiantes y formas de envío autónomas. 

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