Desde Dublín, Irlanda, comienza a resonar una reciente banda llamada Inhaler, liderada por Elijah Hewson, quien en realidad es el hijo del mismísimo Bono de U2. Curiosamente, el año en que más se ha pausado el mundo, la industria de la música sigue produciendo y produciendo. Asimismo, este modesto y singular grupo ha estado en alza, llegando al top 5 en la encuesta Sound of de la BBC. 

La banda resulta ser tan nueva, que no han lanzado un álbum completo todavía. Sin embargo, el sonido que nos invitan a escuchar nos recuerda a aquellas armonías noventeras con las que U2 conquistó a los corazones jóvenes. Sin tratarse precisamente de una propuesta innovadora, lo cierto es que Inhaler trae un sonido en el que la melancolía de una década y la actual, se juntan para abrir paso a los vestigios de una generación que se perdió en el cambio de siglo. 

Su más reciente lanzamiento, es su sencillo “Falling In”, el cual vendrá en su LP debut, y en el que apreciamos a los modestos integrantes de la banda hablar de cómo controlan sus egos con el golpe de fama que tuvieron casi “inesperadamente”.

Tal pareciera, que se trata de una banda tipo secuela de lo que fue U2, porque seamos honestos, incluso con sus nuevos lanzamientos, parece que no sería mala idea dejarle la batuta a Inhaler y permitirnos escuchar la versión mejorada (?) de la banda ochentera. 

No es la primera vez que vemos una banda de apariencia incógnita con una gran herencia detrás. Pensemos en Dhani Harrison, de quien ni siquiera necesitamos aclarar su árbol genealógico, o incluso dentro del mismo cuarteto inglés de los Beatles sucedió con Sean Ono Lennon. Quien según, a mi parecer, ha sido de las figuras que aprendió a quitarle el peso a los apellidos para crear su propio espectro creativo. 

Pero esto no es nuevo y tampoco podríamos llamarle trampa o truco, es decir, a veces sí hay hijos que buscan seguir el paso de sus padres. No sé, piénsalo con Alejandra Guzmán, claramente decidió tomar el mismo camino de la farándula en el que se sumergió su padre, Enrique Guzmán, y bueno, pues si su música no es del mismo estilo, lo que es cierto es que la forma en la que llevan sus vidas privadas quizá sí lo sea. En fin, distintos casos en los que de éxitos y fracasos existen varios ejemplos, ya veremos cómo le resulta Inhaler, ojalá logren dominar sus egos, según su canción, claro. 

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