El mundo de Frida Kahlo ha estado bajo el constante escrutinio de cineastas, escritores, pintores, y la cultura pop, construyendo poco a poco el mito de la mujer que sufrió con la misma intensidad que amó.
Es indudable que la vida de sufrimiento y libertad de Kahlo es hipnótica, deja un hueco en el corazón que sabe muy mexicano, como las canciones de José Alfredo Jiménez o las interpretaciones de Chavela Vargas.
La pasión, los colores chirriantes, la ropa bordada, el tequila y Frida Kahlo son las principales imágenes que sugiere México, un legado del nacionalismo de primera mitad del siglo XX, lo que hace que sea complicado encontrar una perspectiva nueva de la vida de esta pintora. Todos sabemos lo básico, y la cultura pop se ha encargado de explotar las aristas más obvias y trágicas, lo que convierte en un misterio hipnótico la vida de Kahlo.
Por esto mismo, es más que complicado abordar su vida, su sufrimiento y demás aspectos famosos de la pintora, sin que se caiga en la victimización, o simplemente en el cliché, por ello cuando supe de la película Dos Fridas de la directora Ishtar Yasin, me causó intriga la forma en la que podría hablar de una vida tan manoseada a lo largo de más de un siglo.
La respuesta fue un personaje que hace más de 20 años había encontrado a la directora, la historia de la última cuidadora de Kahlo y Rivera, la enfermera costarricense Judith Ferreto. Además de ser la mujer que estuvo con Frida en sus últimos años de vida, lo intrigante transcurrió durante los últimos años de la propia Ferreto.
Después de ser atropellada por un coche, sufrió fracturas muy similares a las que marcaron la vida de Frida Kahlo, en ese momento al enterarse de quién se trataba una historiadora fue a visitarla al hospital, y al entrevistarla vio que tenía en las manos los anillos de Frida. Al poco tiempo regresó a su natal Costa Rica, ahora Ferreto al cuidado de su sobrina, se vestía con huipiles y se pintaba el entrecejo, imitando la imagen más recordada de Frida Kahlo.
Este enigma hizo que Yasin quedara prendada de la historia de esta enfermera, tratando así de desentrañar el porqué que llevó a Ferreto a querer ser Kahlo.
Su primer acercamiento, fue un corto documental, Mi Judith, en el que recrea la historia de esta enfermera por medio de entrevistas de personas que estuvieron cerca, la propia historiadora que la encontró en el hospital, así como su familia.
Después de esta investigación, decidió adentrarse al mundo ficcional, y así poner delante de una lente los curiosos paralelismos que hacían de Judith Ferreto una persona singular.
Como no podía ser de otra forma, Dos Fridas es una obra de autor en la que los rasgos surrealistas, oníricos y nacionalistas característicos en la obra pictórica de Kahlo son el eje estilístico y narrativo de toda la película.
La realidad, los sueños, el tiempo, la vida y la muerte son tan difusas en este largometraje que poco podemos hablar de una historia, a pesar de tener un principio y un final, más bien es un retrato que se va completando conforme los minutos pasan. Como un espejo, Judith Ferreto vislumbra sus últimos momentos de vida a través de los recuerdos de Frida Kahlo, así creando un paralelismo entre su vida y su inminente muerte, pero siempre con amor.
Así pues, aunque podemos vislumbrar la vida de una Frida Kahlo no muy distinta a la que encontramos en casi cualquier bibliografía, podemos mirarla a través de una existencia distinta pero similar a la suya. Tal vez con la misma devoción que Chavela Vargas hablaba de Kahlo, o Diego Rivera, pero siempre mirando desde sí.
Como el título refiere, es una mujer que se está viendo a sí misma en un reflejo que podría ser suyo, uno que amó y nunca pudo olvidar.
La actuación de la reconocida actriz portuguesa María de Medeiros en el rol de Judith Ferreto, crea un personaje inocente frente a la Frida de voz profunda, interpretada por la propia Ishtar Yasin. Un yin y un yang que funciona dentro de la poesía que el propio guion remite, y que justamente de esta manera parece que tenemos dentro de nuestra cabeza a las figuras de esa época.
Así pues, una película distinta a lo que podríamos esperar de Frida Kahlo, una mirada interesante y surreal, lo que hace de Dos Fridas una película poco convencional, pero con mucho corazón, lo que hace de esta producción mexicana y costarricense una película que debe verse y así descubrir a Judith Ferreiro, una falsa Frida, incluso para sí misma.
Dos Fridas de Ishtar Yasin, gracias a Black Canvas Festival de Cine Contemporáneo, tendrá su estreno en México después de un largo recorrido por festivales en todo el mundo, ya que forma parte de la Selección Oficial del festival en la sección “México dentro del canvas”.
No olviden que el Black Canvas Festival de Cine Contemporáneo se llevará a cabo del 1 al 8 de octubre de este año, festejando su tercera edición.
Dos Fridas dirigida por Ishtar Yasin
Sinopsis
Dos Fridas se inspira en la relación de la pintora mexicana Frida Kahlo y su enfermera personal, la costarricense Judith Ferreto. A través del prisma de la memoria de Judith, se entrelazan sueños, pesadillas, mitos y realidad.
En sus últimos días de vida Judith revive momentos de complicidad junto a la pintora, que desde entonces tejen la trama de su destino.