Muchos han previsto la muerte de lo “antiguo” conforme la última tecnología toma partida, y aunque es común que el humano maravillado recurra a ella, también es cierto que lo vintage cada día tiene un espacio más arraigado incluso entre las nuevas generaciones.
Así como ha sucedido con la fotografía, la música ha creado a un club de fans que no reniegan del streaming, pero que aprecia la experiencia de la púa de un tocadiscos apoyada sobre un LP de vinilo.
Que las ventas de los discos de vinilo hayan subido en estos tiempos mucho más que en los noventas, habla mucho más de la notoria fidelidad de sonido, ya que unos buenos audífonos, una buena conexión a internet y Spotify en la calidad más alta puede regalarnos ese sonido.
Y es que la inmediatez ha hecho que la experiencia de oír música se disuelva, y que sea más bien una forma de aislarnos de un mundo caótico. Por lo que el regresar a los vinilos que nuestros padres escuchaban, hace que recuperemos la música como la experiencia y el evento que antes suponía.
Es curioso, porque incluso los CDs han perdido un terreno dramático, pero los vinilos lentamente pero de forma segura han conquistado el corazón de los que desean regresar a esos tiempos en los que no había muchas formas de escuchar música, así que los amigos se reunían en la casa de la persona que tenía un tocadiscos.
Este auge es comparable a las cámaras análogas y a las instantáneas, ya que no estamos viendo un regreso a las cámaras digitales, sino una generación detrás, cuando el tomar las fotografías implicaba mucho más cuidado y tiempo.
Tal vez es que la inmediatez ha hecho todo tan fácil, que necesitamos regresar a vivir la experiencia. Tal vez buscando un recuerdo de antaño que nos haga tener nostalgia de un pasado que no vivimos, pero que existió. O simplemente es una cuestión de coleccionismo, ya que los vinilos los podemos tener en nuestra sala como decoración y demostración a la misma vez de nuestros gustos.
Ya que no sólo los álbumes antiguos los podemos encontrar en un formato de vinilo, sino que la mayoría de artistas lanzan a la vez los CDs y los LPs, este último como uno más caro que le otorga al comprador un objeto único.
Y sin duda, los nuevos tocadiscos son preciosas decoraciones en nuestra sala de estar, además de darle un toque especial al ambiente hogareño al poner un LP mientras hay visitas.
Tal vez sea una añoranza a un pasado que las nuevas generaciones no vivieron, pero sin duda, los LPs desde su creación sólo han llegado para quedarse.
Si deseas sumarte a esta tendencia vintage, adquiere LPs al mejor precio sólo en Sanborns, además de tocadiscos con la última tecnología, que no sólo permite tocar vinilos sino conectar tu smartphone por Bluetooth, y escuchar la radio.
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