La edición 94° de los premios de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas, se llevaron a cabo el 27 de marzo después de varios retrasos, y aunque otras situaciones robaron el foco de la noche, no podemos perder la oportunidad de hablar del premio a Mejor vestuario.
La diseñadora británica Jenny Beavan fue galardonada con una estatuilla dorada, todo gracias a Cruella, dirigida por Craig Gillespie y protagonizada por Emma Stone. Una cinta que se robó las miradas al ser la historia de origen de uno de los villanos más queridos, pero sobre todo por la moda de cada escena.
Ambientada en el Londres de los 70 durante la era del punk rock, la historia se centra en la historia de fondo de Estella, una huérfana y aspirante a diseñadora de moda que, con la ayuda de sus amigos estafadores, Jasper (Joel Fry) y Horace (Paul Walter Hauser), consigue un trabajo en los lujosos grandes almacenes Liberty London y finalmente es contratada por la baronesa von Hellman (Emma Thompson).
Ver esta publicación en Instagram
La cinta es sumamente divertida y con el toque de Disney con una pizca de punk inolvidable, y no había mejor manera de brindarle un reconocimiento a Cruella que con ropa increíble. Al final, así es como recordamos a esa villana.
Jenny Beavan fue la responsable de dar vida al enfrentamiento de moda entre Estella y la baronesa, una hazaña que la diseñadora de vestuario dos veces ganadora del Premio Oscar (A Room With A View, Mad Max: Fury Road) logró con 47 cambios de vestuario para Cruella y 33 para la baronesa, el proyecto más grande en el que Beavan ha trabajado hasta la fecha.
La paleta de colores caracteristica de Cruella se mantuvo, negro y blanco, además de agregarle gris y toques de rojo. La diseñadora de vestuario asegura que las inspiraciones para crear a Cruella fueron diversas por todos los estilos que se unen, pero sobre todo encontró inspiración en Vivienne Westwood, Alexander McQueen y John Galliano.
Sin duda, marcando una línea muy definitiva con la joven Estella, quien tiene una estética punk inspirada en la cantante alemana de nueva ola Nina Hagen.
Por su lado, para la Baronesa, Beavan eligió una ruta más anticuada, inspirada en Dior, con un guardarropa de cálidos marrones y dorados, salpicado de turbantes, tafetán y brillos que casi se pudiera esculpir. Todo gracias a las obvias influencias y su situación actual, que devienen de los diseñadores de moda de los años 50 y 60.
Ver esta publicación en Instagram
Varios momentos de la moda en la película fueron dictados por el guion, que proporcionó a Beavan un marco a medida que se acercaba a cada look. Ella menciona que no es diseñadora de moda, sino que le encanta cómo es que la ropa habla, y así es como construye a sus personajes.
Dentro de esta forma de trabajo vio nacer al vestido escarlata con el que Cruella irrumpe en la fiesta de la Baronesa, así como el vestido creado con periódicos que hablan de la enemistad entre estos dos personajes.
Sin duda, el personaje principal de Cruella es la moda, por lo que el trabajo de Beavan ganó con creces la estatuilla a Mejor diseño de vestuario en estos Premios Oscar.
Disfruta de películas como si estuvieras en el cine con la tecnología que sólo Sanborns tiene para ti, da click AQUÍ.