La figura del niño en el cine ha buscado representarse de distintas maneras en todos los géneros, algo nunca sencillo. Desde la comedia hasta las historias más desgarradoras estos personajes son empleados para explorar más allá de los temas del crecimiento, la descomposición familiar y muchas veces simbolizan la inocencia o el futuro social. Varios de estos pequeños personajes han quedado en la memoria colectiva y corazón de los lectores. En su mayoría estos niños luchan contra un mundo que busca avergonzarlos, incomprendidos por sus padres, marginados para la sociedad, pero nos han enseñado que por más cruda que sea la realidad son capaces de sobrellevarla con su imaginación y fortaleza. 

Un claro ejemplo de lo anterior es la cinta Matilda, la cual marcó la infancia de miles de niños de todo el mundo, historia basada en la novela de Roald Dahl. Fue así como en el año 1996, el famoso actor Danny DeVito (que también actúa en la película) nos presentó esta historia de corte fantástico que seguía los pasos de una niña un tanto especial. Su nombre era Matilda Wormwood (Mara Wilson) y aquello que la hacía diferente al resto era su increíble capacidad intelectual a su corta edad. Desde temprana edad, ella era capaz de cuidar por sí misma, comprendía conceptos e ideas impensables para una niña tan pequeña y hasta tenía como entretenimiento matar sus horas leyendo libros que nada tenían que ver con cuentos infantiles llenos de dibujos. Matilda era todo un descubrimiento cargado de un gran potencial por descubrir, pero su entorno no era precisamente el más favorable, llegando a infravalorarla mientras obstaculizaban su ansia por seguir aprendiendo y aspirar a algo más que el resto de su entorno. 

Pero no olvidemos los momentos icónicos, como esa escena en la que un niño se devora un pastel entero, o cuando la malvada directora lanza a una niña tomándola por las trenzas o ese perfecto postre que cae en su plato con todo y tenedor, y eso se debe a que Danny DeVito logró traducir la visión del escritor en una película que, años después, sigue siendo icónica. 

Ahora y en medio de la promoción de Jumanji: Next Level (cinta en la que DeVito participa), el actor comentó, por medio de una entrevista a Comickbook.com que siempre quiso hacer Matilda 2 cuando Mara Wilson todavía era una niña (Wilson ahora tiene 32 años), pero cree que todavía se puede hacer ahora que la protagonista es adulta. 

El actor dijo "Pero eso fue hace 20 años, hace 25 años. Quizás Matilda tiene un hijo y podemos hacer algo, no sé". Parece que DeVito ya tiene la historia planeada, ahora solo falta que la desarrolle y que encuentra a un niño tan carismático como Mara Wilson, que apareció en unas cuantas películas infantiles icónicas, para interpretar al hijo de Matilda. 

Hasta el momento DeVito no ha confirmado que esta idea se concrete, pero no suena nada raro, ahora que los grandes estudios pretenden inundar no solo los cines, sino también las pantallas de televisión con historias que reviven la cultura pop, dando vida a este tipo de personajes entrañables. No sería una gran sorpresa que tengamos una secuela de Matilda con Mara Wilson como mamá o, incluso, trayendo la historia de vuelta como un reboot. Sin embargo, solo se trata de un simple deseo de DeVito, sin embargo, la empresa Netflix sí está trabajando junto The Roald Dahl Story Company para llevar a cabo un universo de series animadas basadas en los libros de Dahl.

El proyecto incluirá las historias de Charlie y la fábrica de chocolate, Matilda, El gran gigante bonachón, Los cretinos, La maravillosa medicina de Jorge, Boy: Relatos de infancia, Volando solo, El cocodrilo enorme y otros más.