Gracias las circunstancias actuales, no es lo mejor salir a tomar un café, y personas que disfrutan este líquido negro en su local favorito, se encuentran en un gran problema. Muchas veces necesitamos una taza, y simplemente no queremos gastar en un servicio de envío que tardará bastante en arribar.

Si es tu caso, o simplemente amas el café pero nunca has sabido cómo hacerlo en casa de la forma más óptima, no te preocupes, aquí te daremos unos cuantos consejos para que disfrutes de una gran taza de café.

Compra un buen café natural, y en pequeñas porciones

Muchos recomiendan tener tu propia moledora de café (que incluso lo puedes moler a mano) pero no siempre tenemos el tiempo o la paciencia, pero si los tienes sin duda comprar el grano entero es la mejor forma de conservarlo.

Si formas parte del resto de nosotros que no tenemos máquina, ni paciencia para molerlo a mano, sin duda tu mejor opción es comprar en pequeñas porciones para que te lo puedan moler ahí mismo. Ya que en el momento en el que lo muelan, comenzará a perder su olor y al paso de los días, su sabor y consistencia.

De igual forma, los dos tipos de café más vendidos en el mundo son la mezcla arábica y la robusta. La arábica contiene menos cafeína y proporciona un café más suave con aromas afrutados. Las robustas tienen más cuerpo, son algo más amargos, concentran una mayor cantidad de cafeína y se suelen percibir como más fuertes de sabor. No importa cual sea tu favorito, pero trata de que sea lo más fresco posible.

Adapta el grado de molido

Los expertos en café saben que el grado de molienda es crucial para preparar un café de altura, y es que cuando se muele se busca facilitar la extracción mediante la infusión, por lo que deberá ser distinta según el método de preparación.

En casa realmente no tenemos que complicarnos tanto (si deseas aprender a ser barista, adelante, este es el momento), por lo que basta con saber que cuanto más tiempo pase el café en contacto con el agua, más grueso deberá sel grano. Por ejemplo, para procedimientos de filtrado que requieren más de 5 minutos, buscaremos una molienda gruesa, mientras que las cafeteras express requieren un grano más fino.

Ajusta la proporción agua-café

Aquí depende de cómo te guste el café, y del tipo de herramienta que tienes en casa, porque aunque queramos un expresso posiblemente nunca lo logremos con una prensa francesa. 

Es muy importante el agua, que esté limpia y sin ningún tipo de olor, y que busques el equilibrio deseado entre ella y el café. Aunque un espresso suele tener unos 8 gramos de café, y esa sería la medida si tienes una cafetera italiana, en realidad aquí es un poco a tu gusto.

Lo que sí importa es que claramente entre más agua, el café estará más ligero. 

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