Al inicio parece ser el idilio, no tener que transportarse entre distancias largas para llegar a tu lugar de trabajo. Tener a la mano tu cocina para prepararte la comida que más te gusta sin tener que gastar mucho, e incluso para poder disfrutar de tu espacio desde otro enfoque. Sí, al inicio el Home Office en momento de confinamiento parece ser un idilio. Sin embargo, puede convertirse en algo cansado a la larga, sobre todo porque las restricciones de salidas son el principal motivo. Piénsalo, cuando tu trabajo es desde casa pero puedes salir a la calle sin ninguna preocupación, vuelve todo el panorama distinto, pero cuando no es así quizá se vuelva un poco más sofocante y agobiante, por eso es esencial buscar rutas para hacer esto más llevadero.
Es primordial que se entienda la situación como una extraordinaria. Es decir, más allá de estar trabajando desde casa, se está viviendo una crisis sanitaria, y por ende económica, a nivel global, la cual nos está orillando a tener que trabajar desde nuestros hogares para salvaguardar nuestra salud y la de los demás. El mundo definitivamente ya no es el mismo, y quizá no vuelva a serlo, pero antes de ponernos alarmistas, es mejor enfrentar la situación con una mirada positiva.
Por eso te daremos tips básicos para sobrevivir al Home Office en tiempos de crisis, y hacerlo más llevadero sin dejar de ser productivos.
Espacio de trabajo
Después de casi dos meses de Home Office, seguramente ya cuentas con lo esencial: un espacio afín para trabajar, en donde tengas todo lo necesario para llevar a cabo tu trabajo sin que te haga falta nada. Si no es así, es recomendable que busques un espacio específico en el que cuentes con una mesa firme, red wifi estable y los demás aditamentos que necesites para cumplir con tus tareas laborales.
Establece tus horarios de actividades
Algo que seguramente ya haces y no está de más recordar, es el paso de la mentalización. Recuerda que el espacio que adaptaste para trabajar es tu oficina, no tu casa. En este paso, también recuerda los horarios establecidos para ejercer tus labores, incluyendo un espacio para tu comida y pequeños descansos de cinco minutos para estirar tus piernas y despejar la mente.
La tecnología como tu mejor amiga
Vivimos en el siglo XXI, año 2020, así que aprovecha todo lo que la tecnología tiene para ayudarte con hacer más llevadero tu Home Office. Recurre a las apps esenciales para estos tiempos de distancia, como Zoom, la aplicación que te ayuda para hacer videoconferencias. También recuerda Google Drive o Monday (gestión de proyectos), para programar tu día, transferir archivos y estar en contacto con tu equipo de trabajo sin interrupciones o fallas técnicas.
Olvídate (por un momento) de los deberes del hogar
Ahora que trabajamos desde casa es casi un hecho que los memes que han surgido a partir de esto son una verdad. Es decir, ese meme que dice que parece que los trastes se reproducen, y además sucios en el fregadero, es uno que casi todos podemos confirmar. Y lo peor de todo, es que muchas veces esto puede distraernos de nuestras labores. Es decir, si eres como yo, y de repente se te dispara el TOC es común que no puedes dejar que un par de trastes estén sucios y no hacer nada. Pero tendrás que luchar contra esto y enfocarte en lo primero, tu trabajo y después hacer un espacio para evitar que se empalmen las tareas y uno retrase a la otra.
No es tiempo libre, habla con tus roomies o tu familia
Si vives solo quizá esto no es un paso esencial, o al menos no del todo. Es decir, puedes vivir solo y tener a alguien que te marque en horarios que no son óptimos para tus labores, lo más fácil en este caso es decir que no puedes atender por ahora y posponer las llamadas o chats.
Sin embargo, lo difícil viene cuando tienes que convivir con tu familia o con roomies en el mismo espacio. Para esto basta con que hables clara y calmadamente con ellos y recordarles que habrá horarios en los que no estás disponible para atenderlos.
Otros puntos básicos para que tu Home Office no se convierta en un agobio son:
- Antes de iniciar, crea una rutina, como si fueras a la oficina: báñate, vístete y desayuna para que tengas energías anímicas y físicas para el día.
- Planifica tu día, establece metas a realizar para tener un cronograma más preciso y enfocado del día.
- Ahora más que nunca, aprovecha las horas que pasas en el tránsito o en el transporte público, leyendo un libro, ejercitándote en casa o simplemente descansando. No se trata de tener que aprovechar esta cuarentena para leer los siete tomos de Proust, pero recuerda fijar actividades de esparcimiento mental. No te satures con noticias y trata de conciliar el sueño en horas habituales para rendir al máximo en el día.
Vamos, que más allá de una crisis mundial, también es un momento histórico y lo mejor que podemos hacer es ponerle buena cara y ayudarnos a nosotros mismos para que todo mejore con el tiempo.