El internet es un mundo que, como el nuestro, puede ser utilizado como medio para información, comunicación, y claramente, el fraude y el robo de tus datos personales que directamente involucran dinero.
¿Alguna vez te ha llegado un mensaje o correo electrónico de tu banco u otra compañía informándote que si no haces ciertas acciones cerrarán tu cuenta de forma inminente?
Este tipo de correos son mayormente conocidos como phishing (término acuñado a partir de la palabra inglesa "fishing", “pescar” en español), los cuales suelen ser mensajes que aparentan proceder de empresas legítimas, pero que son enviados con el objetivo de robar (o pescar) información del destinatario.
Pero estos correos no sólo provienen de supuestos bancos sino de aparentes agencias de viajes, organizaciones oficiales (en México como SAT, CFE), minoristas en línea, compañías aéreas, entre otras empresas, así como promesas de trabajo o una vía sencilla de conseguir dinero.
Así como nos cuidamos del fraude en la vida real, debemos cuidarnos en línea, así que te damos unos cuantos consejos para prevenir los ataques de phishing:
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Aprende a identificar claramente los correos sospechosos
Así como las extorsiones telefónicas o los trabajos fraudulentos en la vida real, en el phishing existen algunos aspectos que son muy diferenciadores de un correo legítimo del fraudulento:
- Tienen ganchos que te hacen dar clic, como mensajes alarmantes o regalos.
- Por lo general estos correos no son informativos, sino te piden accionar de alguna manera.
- Llevan como remitente el nombre de la empresa o el de un empleado real de la empresa.
- Utilizan nombres y adoptan la imagen de empresas reales.
- Incluyen webs que visualmente son iguales a las de empresas reales.
- Pero la mayoría de las entidades de confianza NUNCA solicitarán datos personales ni información de la cuenta a través de correo electrónico.
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Nunca entres a la web de tu banco dando clic a un link dentro de un correo sospechoso
No hagas clic en hipervínculos o enlaces que estén dentro del cuerpo del texto del correo electrónico, ya que de forma oculta, te podrían dirigir a una web fraudulenta para así robar tu información.
De igual forma, tampoco abras archivos adjuntos a estos mensajes sospechosos o extraños, especialmente los que vengan en formato Word, Excel, PowerPoint o PDF, ya que pueden venir con malwares que infectan tu computadora.
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Introduce tus datos únicamente en webs seguras
Hay una forma muy fácil de identificar una web segura y es que debe comenzar por “https://”, ya que la “s” es lo que determina si es segura o no, de igual forma revisa que en tu navegador aparezca el ícono de un pequeño candado cerrado.
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Protege tu computadora
A pesar de si eres una persona precavida con el phishing, es indispensable mantener tu equipo protegido con un buen antivirus, la mayoría de ellos ya bloquean este tipo de ataques y te alertan de ellos.
Ante la mínima duda sé prudente y no te arriesgues, si recibes algún mensaje del estilo y te genera duda saber si es real o no, comunicate con la entidad de la que “recibes” este mensaje y comprueba si es legítimo no. No te dejes engañar.