Europa ha iniciado su largo y lento proceso de desconfinamiento. Algunas tiendas abren; algunas escuelas retoman clases, actividades sociales recuperan su lugar en la vía pública.

Pero otras muchas siguen vetadas. Pocos países permiten a día de hoy las grandes aglomeraciones, barrera que pospone la celebración de conciertos o fiestas. Excepto si se realizan desde el automóvil. 

¿Será la nueva forma de diversión nocturna? Suena descabellado, sin embargo, en algunos países como Alemania y Dinamarca ya están implementando esta medida. 

Es el caso de Dinamarca, que el pasado 24 de abril celebró el concierto del artista danés Mads Langer ante 500 personas que lo vivieron dentro de sus autos a las afueras de la ciudad de Aarhus. El público podía escuchar el concierto a través de la radio FM de su vehículo e incluso se creó un encuentro virtual con el artista a través de la plataforma Zoom. 

Según los organizadores, el evento se desarrolló sin ningún incidente. Por otra parte, el Club Index, ubicado en una ciudad alemana que colinda con la frontera de Países Bajos, decidió crear una propuesta: una “autodiscoteca”.  

Pero, ¿en qué consistió este proyecto? Como si se tratara de un Auto-Cinema, el antro llevó a cabo una fiesta en el estacionamiento de sus instalaciones. De esta manera, los amantes de la música (y la fiesta, claro) pudieron disfrutar de un concierto de electrónica, sin tener que bajar de sus autos, donde decenas de coches que encienden sus luces y hacen sonar sus bocinas al ritmo de la música, dejando momentos bastante surrealistas, seguramente insoportables para los vecinos. 

Pero, ¿cuáles fueron las medidas que se aplicaron para que no se pusiera en riesgo la salud de los asistentes? Las autoridades locales enviaron a policías para que verificaran que nadie saliera de sus autos y que cada vehículo transporta máximo dos personas (lo estipulado por la ley de aquel país). 

Por cierto, el Club Index tiene previsto repetir el evento el próximo 9 de mayo, ahora orientado a familias. 

El éxito, está por demás decirlo. El automóvil ofrece una ventaja innegable en tiempos de distanciamiento social: evita todo contacto personal si es necesario. De ahí que los Auto-Cinemas puedan disfrutar de un renacimiento, al uso de los célebres cines de los años cincuenta y sesenta. En tiempos difíciles, son una solución inteligente a las restricciones. 

¿Serías parte de una de estas fiestas o conciertos en el coche cuando las restricciones comiencen a aligerarse en nuestro país? 

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