Si has salido a la calle a recoger algo, a comprar despensa o a pasear a tu perro, ya es casi requisito hacerlo con una mascarilla facial. Es la forma más tangible en la que nos cuidamos y cuidamos a los demás.
Para los que usan lentes oftálmicos (u oscuros), la mascarilla se vuelve aún más incómoda que para el resto, ya que es más que común que se empañen los lentes. Una característica que la nueva normalidad adhiere a su día a día.
Pero no te adelantes, la solución no son lentes de contacto, ni es quitarte la mascarilla (por favor, no lo hagas), sino cuestiones tan simples que tenemos que comenzar a hacer si queremos disfrutar de una buena visión al protegernos en estas épocas.
Primero que nada, ¿qué causa este molesto fenómeno?
Cuando tu mascarilla entra en contacto con tu boca, el aire caliente que sale de ésta toca las lentes que están frías y la diferencia de temperaturas genera una humedad que se queda atrapada en el espacio entre tus ojos y las gafas, provocando que se adhiera a sus cristales.
Por lo que en un ambiente muy cálido, será complicado que se te empañen, pero aun así, veamos cómo puedes evitarlo si ya está pasando.
El primero y el más fácil, ponte primero la mascarilla facial y luego los lentes. Con esto lograrás evitar que se libere el aire caliente de tu boca por dentro de los cristales. Coloca los lentes como un sostén en la parte superior de la tela de la mascarilla.
Luego, el popular método de la barra de jabón, algo que puede funcionar pero tienes que tener en cuenta que debes usar un jabón de máxima calidad sin partículas abrasivas, de lo contrario tus lentes se rayarán.
Así pues, sólo necesitas cortar un trozo de jabón y frotar suavemente la zona interior de los lentes, así creando una capa muy fina de jabón. Después limpialos con el pañuelo que usas normalmente, pero sin demasiada fuerza.
Lo importantes es que dejes una fina capa de jabón sobre el vidrio. Es posible que notes ligeramente borrosa tu visión, pero nada en comparación a la capa nebulosa que empaña tus lentes.
Por último, y tal vez el método más efectivo es conseguir un producto antivaho. Puedes encontrar estos productos en línea o en tiendas departamentales, y ya se está popularizando su uso en diferentes presentaciones, en spray, gel o gamuzas.
Estas últimas son las más demandas porque el antivaho viene un la toallita, por lo que sólo tendrás que limpiar tus lentes con ella y listo.
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