San Benito, el Conejo Malo o Bad Bunny, sea como sea que lo nombres, ha alcanzado la cima para seguir escalando. Lo subraya con el lanzamiento de su más reciente álbum, YHLQMDLG, y por si no había quedado claro, Benito se ha decidido a reafirmar que él hará y seguirá haciendo lo que le plazca
Más allá de sus uñas largas, sus vestuarios completamente rompedores de estereotipos de género y todo lo que rodea la emblemática figura del Conejo Malo, esta afirmación es literal, pues YHLQMDLG eso es lo que significa: "Yo hago lo que me da la gana".
Bajo este lema y estas siglas, que al principio parecían tratarse de algo indescifrable, Bad Bunny sigue revelando en sí mismo un símbolo reivindicador de nuestros tiempos. Se trata de un hombre latinoamericano, exponiendo un género con muchos elementos machistas desde el plot twist en el que tanto discurso, imagen y posturas políticas han protagonizado su carrera.
La noche antes de su lanzamiento, comentó para Entertainment Tonight lo siguiente: "Mi trabajo es lo que me apasiona. Simplemente hago lo que me satisface. Intento complacer a la gente. Intento complacerme a mí mismo".
Después de su álbum debut X 100pre, el cual ganó como Mejor Álbum de Música en los Premios Grammy Latinos en 2018, Bad Bunny ha ido transformando y mutando su imagen y música. Sin tratarse precisamente de una evolución musical, sino más bien desde el aire político.
Ha quedado claro que el cantante de trap se ha tomado en serio las causas políticas, tanto de su país, como las que incumben al resto del mundo. Desde su aparición en las protestas de Puerto Rico, junto con Residente y Ricky Martin, hasta su última manifestación política durante el Tonight Show con Jimmy Fallon, en el que vistió una playera con la siguiente leyenda: “Mataron a Alexa, no a un hombre con falda”, para reclamar justicia y mostrar su apoyo hacia la comunidad transgénero.
Es un hecho que el perreo se ha convertido en parte de nuestras vidas, y más claro está quedando es que la mirada política hacia el mundo se ha convertido en una forma de vida y una necesidad de más interés social. Desde lo kitsch, y el terreno de lo masivamente popular, estos mensajes de reivindicación están quebrando cristales y muros que asfixiaban las libertades de diversos grupos marginados, y Bad Bunny es un claro ejemplo al respecto.
Claramente no es el héroe de ninguna revolución, ni mucho menos, pero lo que sí es verdad es que se ha convertido en una fuerte voz para la convocación de grandes masas hacia la mirada de la justicia, los derechos humanos, y sobre todo la del perreo hasta el suelo. Aunque no sea ningún héroe social, es cierto que su perreo ha revantado más conciencias y caderas, que cualquier otro líder político. Ahora disfruta de su álbum completo, y siente el flow de San Benito y sus 20 nuevas canciones.
Descubre más de Bad Bunny sólo en Sanborns.