Entre las miles de hierbas, plantas y sustancias naturales que el planeta nos da, existe una bastante rica en nutrientes llamada sábila. Desde sanar quemaduras, golpes y laceraciones, la sábila se ha convertido en un producto bastante codiciado por la industria de la belleza. 

No por nada, también se ha convertido en el ingrediente secreto para tener un cabello fuerte, sano, brillante y más largo. Ahora te diremos de qué manera aplicarla, para mejores y satisfactorios resultados. 

Antes que nada, ya sabemos que sus beneficios son múltiples. Se trata de una de las plantas medicinales más populares y que más se ha aplicado en todo el mundo, como remedio a distintas cosas. Incluso, existen registros de esta planta plasmados en los muros de templos egipcios. 

Es decir, se trata de una planta ancestral que ha servido como método y solución a distintas circunstancias, desde los albores de la humanidad. Hoy en día, la encontramos en múltiples productos, desde cremas, ungüentos, lociones y hasta bebidas con la etiqueta de saludable.

También conocida como aloe vera, es una planta originaria de África y pertenece a la especie de las suculentas. Se da mejor en regiones templadas o tropicales. Existen cerca de 200 variedades de aloe vera, de las cuales cuatro (barbadensis miller, arborescens, maculata y chinensis) cuentan con propiedades curativas y medicinales demostradas científicamente.

Así es, se trata de un ingrediente que, si aplicas en tu cabello, obtendrás un pelo mucho más brillante y además estimulará su crecimiento. Incluso, si tienes caspa, será un gran remedio para acabar con la picazón que te ocasiona. 

¿Cómo aplicarlo en tu cabello?

Aunque ya utilices productos con sábila, aplicarla de manera directa será mucho más estimulante para que sus efectos no tarden en dar resultado. Para aplicarla, basta con que extraigas la pulpa de sábila de tu planta, cortando previamente uno de sus extremos, luego machaca para conseguir una pasta. Aplica este remedio en tu cuero cabelludo y déjalo actuar durante 10 minutos.

Mientras lo dejas reposar, aprovecha para darte un masaje suave en tu cuero cabelludo. Esto ayudará a estimular la circulación y provocará que el crecimiento de tu pelo sea mucho más acelerado. Después enjuaga, y listo. Repite esta rutina unas dos o tres veces por semana, y verás los resultados.

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