¿Superstición, magia o mala suerte? “Mmm... no lo sé, Rick” pero de que pasan cosas curiosas, pasan.
A finales de la década de los 70 el cine de horror experimentaba una fuerte sacudida en Estados Unidos, The Texas Chain Saw Massacre de Tobe Hooper y Halloween de John Carpenter aparecían en la pantalla grande. Ambas captaron la atención de varios aficionados de las historias más crudas y arriesgadas de lo que se había visto en años anteriores.
En el caso de la cinta de Carpenter, la historia de un asesino que atacaba niñeras durante la Noche de Brujas ponía los cimientos para el slasher, un género que cobraría gran popularidad en los años siguientes. A partir de ese momento nada volvería a ser lo mismo.
Hoy nos adentramos en este mundo donde el grito está muy bien visto en la ficción, donde el público murmura a los protagonistas que no se metan a esa cabaña en medio de un lugar sombrío y alejado de todo.
Es así como en 1980 una producción de bajo presupuesto y corte independiente surgió; en el guión de Victor Miller un grupo de jóvenes es asesinado en un campamento. La cinta se llamó Viernes 13 y fue dirigida Sean S. Cunningham quien anunciaba la llegada de una de las franquicias de horror más duraderas en la historia del género (12 hasta el momento).
La fórmula era sencilla. Chicos sin camisa, chicas ligeras de ropa o sin ella y alguien utilizándolos de carnada fácil para sus atroces asesinatos. ¡Ah! Y un campamento de verano, Camp Crystal Lake.
Es probable que si Viernes 13 se hubiera estrenado en estas fechas, casi nadie hubiera pagado el precio de una entrada para verla. Pero hace 40 años, estrenada en Estados Unidos un viernes (un 9 de mayo de 1980), la cinta ocasionó un lleno total en salas de todo Estados Unidos y se convirtió en un fenómeno B que nadie quería perderse. Desde aquel día las máscaras de hockey fueron las más espeluznantes, eso se lo debemos a Viernes 13.
Guardadas las proporciones cualitativas y relevancia cultural, como el director Tobe Hooper con The Texas Chainsaw Massacre, Cunningham logró una película muy influyente hasta nuestros días. Ninguna secuela se le equipara y, como maldición gitana, ninguno de ambos realizadores jamás dirigió otro filme igual de bueno. Igual que A Nightmare On Elm Street (1984), todo funciona bien en la primera película: bajo presupuesto, un guion terrorífico, locaciones adecuadas, efectos especiales definitivos y un elenco prácticamente desconocido en ese momento.
Por otra parte, otro gran acierto del slacher fue publicar un anuncio de la película como un producto ya terminado, mientras carecía de guion, elenco y financiamiento. Con esto lograron dinero y distribución de uno de los más reconocidos estudios, Paramount, cuya infraestructura ayudó a que fuera un éxito rotundo. Digamos que equivale a que una banda de rock indie, firme con una disquera de peso, sin tener siquiera un demo. ¿A quién se le ocurrió esto?
A todo esto ¿Quién es Jason Voorhees?
Y empezamos con un spoiler (para quien aún no la haya visto). La primera cinta no cuenta con la aparición del emblemático personaje de la franquicia, pues hace alusión a la parte más conservadora de los Estados Unidos, ya que el villano de la película es la Sra. Voorhees, quien señala que la razón de su venganza se debe a que los consejeros del campamento se la pasaban teniendo sexo y consumiendo drogas en lugar de cuidar de los chicos. La película es un gran sermón por parte de los adultos hacia las conductas de los jóvenes de la época. De hecho, su guionista, Victor Miller, la había concebido con el delirante psycho killer llamado Jason nacido con una deformidad (hidrocefalia) como “una víctima y no un asesino”.
Así que el verdadero asesino en serie de esta primera entrega no era él. En las sagas siguientes ya le pusieron las pilas (sin que a Miller le gustara la idea). En la segunda parte aparecía con la cabeza convenientemente tapada, y no fue hasta la tercera cuando pudimos empezar a verle de nuevo en acción con el rostro oculto por su inconfundible máscara de hockey.
Para conmemorar el 40 aniversario de la cinta Paramount Pictures ha revelado su nuevo Blu-ray edición SteelBook. Este relanzamiento de la película original viene con una atractiva obra de arte en su portada, el Blu-ray será la versión sin cortes de la película, con una serie de características muy especiales. Alguno de esos anuncios ochenteros diría. “es algo que no te puedes perder, si no.. ¡Jason vendrá a por ti!”
Por esa razón Viernes 13 de Sean S. Cunningham no fue el primer slasher, quizás tampoco el mejor, pero sí el que sentó bases tan sólidas en un género que hemos conocido y disfrutado largamente.